La operación limpieza del Valencia: el comienzo de una nueva era

El Valencia ha vivido la mayor limpieza de vestuario que se recuerda en muchos años. Hasta el monento, y todavía no podemos decir que haya terminado, se han marchado Alessandro Florenzi, Jaume Costa, Ezequiel Garay, Francis Coquelin, Dani Parejo, Ferran Torres y Rodrigo Moreno. Son 7 salidas, 6 de ellas de jugadores titulares, 2 de ellos capitanes hasta el año pasado, y sobre todo, gran parte de los pesos pesados del vestuario estas últimas campañas.

Se ha recaudado en torno a los 65 millones de euros, que pueden ser algunos más si se cumplen las variables en los contratos de Ferran con el Manchester City y Rodrigo con el Leeds United, amén de un ahorro en la masa salarial de la plantilla que supera los 25 kilos anuales. Un Valencia completamente nuevo respecto a los últimos 3 años especialmente, en todos los sentidos, y con los jugadores que eran la esencia, en muchos casos, fuera del club. Una apuesta muy arriesgada, pero desde cierto punto de vista, en parte necesaria. Y no, algunas operaciones no las hubiera hecho igual, ni mucho menos.

Se empieza a construir otro equipo. En el fútbol, y en general en la vida, se dice siempre que lo que esté bien no lo toques, pero hay veces que es complicado por diversos factores. ¿Ha habido venganza y revancha de la propiedad con algunos jugadores? Pues si es que no, no lo parece, porque los que fueron más afines a Marcelino de forma pública ya no están, aunque no todos los que le mostraron cariño se han ido. Por eso el club debería explicar muchas cosas, sin miedo, y en el cara a cara. En cualquier caso, arranca de verdad una nueva era.