Análisis definitivo de la plantilla del Valencia 18/19

Así queda la plantilla del Valencia CF 2018-2019. Con el cierre del mercado un viernes antes de partido del Liga, con todo el revuelo armado por el fichaje a última hora de Gonçalo Guedes y esas especie de suspense incluso con el jugador aquí para firmar el contrato, con el comienzo de Liga inesperado y esos tropiezos que han hecho saltar algunas alarmas, incluso con la posibilidad de la salida de Ferran Torres cedido a la Real Sociedad hasta el 30 de junio del año que viene, hacer un estudio calmado y concienzudo de cómo le ha quedado el plantel a Marcelino García Toral quizá ha pasado por alto, al menos el actualizado con las últimas novedades, que incluso todavía podrían ser algunas más caso de darse esa salida a préstamos de la que estamos hablando.

En la portería repiten Jaume y Neto, y se puede decir que el marco está más que bien cubierto. En el lateral hay una especie de drama/debate, ya que Piccini está generando muchas más dudas de las esperadas, y como sustituto “natural” sólo se cuenta con Rubén Vezo, que despierta aún más dudas que el italiano. Gayà y Lato (que sigue sin disponer de minutos) siguen siendo un seguro en el lateral zurdo. En los centrales han surgido, de forma inesperada, muchas más dudas de las esperadas. Ezequiel Garay (demasiado tiempo lesionado), Gabriel Paulista (intocable), Mouctar Diakhaby y Jeison Murillo (inédito) debían ser un póker de lujo, pero están generando dudas.

Parejo, Kondgobia, Coquelin (casi a punto de volver) y Daniel Wass forman un centro del campo con más recursos que el año pasado, ya que casi dobla sus efectivos. Carlos Soler en banda derecha, de momento junto a Ferran Torres, y Gonçalo Guedes en la izquierda unido a Denis Cheryshev dan más nivel a los costados del equipo. Arriba es donde se han dado más cambios, y se ha aumentado la competitividad. A Santi Mina y Rodrigo Moreno hay que añadir a Kevin Gameiro, por fin aquí, y Michy Batshuayi, que forman una delantera importante… pero que de momento no ve demasiada portería. En definitiva, un mejor equipo.