'Arrecifes Valencia' da el pistoletazo al buceo recreativo en la Malvarrosa

Valencia dispone del primer arrecife subacuático artificial de España, con fines medioambientales, turísticos y para la práctica de buceo deportivo.

Redactor Jefe | 21 AGO. 2014 | 13:53

La playa de La Malvarrosa de Valencia dispone del primer arrecife subacuático artificial de España, situado a muy pocos metros de la costa. El Alcalde en Funciones y Concejal Delegado de Deportes, Cristóbal Grau, presentó este miércoles el proyecto “Arrecifes Valencia”, y ha asistido a la inmersión de una de las estructuras submarinas, acompañado por el Catedrático de Puertos y Costas de la Universidad Politécnica de Valencia, José Serra Peris, y por el Comandante Barrachina, Jefe Accidental del Tercer Batallón en Emergencias, (UME, Unidad Militar de Emergencias), con sede en Bétera.

Culminan así varios meses de trabajo en el proyecto ‘Arrecifes Valencia’, con el traslado y hundimiento a 180 metros de la costa de tres estructuras artificiales, dispuestas con el objetivo de favorecer la regeneración de las playas y preservar la biodiversidad del fondo marino, además de atraer a aficionados del ecoturismo y de la práctica del buceo deportivo. Se trata de un proyecto impulsado desde la Fundación Deportiva Municipal, y desarrollado por la Universidad Politécnica, con la colaboración de la Federación de Actividades Subacuáticas.

Esta mañana ha sido reflotada una de las piezas desde el fondo de la Marina Real Juan Carlos I, y trasladada frente a La Malvarrosa, en una acción en la que han participado los equipos y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) del Ejército Español; el Grupo Especial de Actividad Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil; Salvamento Marítimo y la Marina Real Juan Carlos I, que ha sido coordinada por el experto en actividades subacuáticas Oscar Noguera. En total son tres las estructuras de hormigón “no invasivo”, de 18 a 20 toneladas de peso cada una, que están siendo colocadas a lo largo de esta semana (entre ayer, hoy y mañana) en un frente de alrededor de 90 metros de largo, a unos 4 metros de profundidad.

Los arrecifes artificiales han sido reflotados desde los fondos de la Marina Sur, donde habían sido sumergidos hace varios meses para ir generando un hábitat marino, y desplazados hasta la playa de La Malvarrosa, a unos 180 metros de la costa. Se trata de una compleja operación por el peso de las estructuras y el camino a recorrer, unas dos millas marinas (3.2 kilómetros aproximadamente). El Comandante Barrachina ha explicado ante los medios de comunicación el proceso de reflote, traslado e inmersión de las tres piezas, que supone varias horas de tarea, y que se realiza en tres días sucesivos. Dado que cada pieza tiene un peso aproximado de 20.000 kilos, se hace necesario el uso de globos de aire para poderlos elevar.

Tal como ha explicado el Concejal Cristóbal Grau, “el proyecto ‘Arrecifes Valencia’ tiene una vertiente científica y medioambiental, y otra vertiente de proyección turística y deportiva, para convertir a la ciudad en un nuevo destino turístico de buceo”. El proyecto ha sido desarrollado con la colaboración de los catedráticos de la Universidad Politécnica de Valencia Pedro Serna y José Serra; los biólogos Víctor Romeral, Inmaculada Duro y Javier Samsundar; así como otros técnicos para el seguimiento futuro de la instalación deportiva submarina y buzos.


LA BARRERA DE ARRECIFES REDUCE LA PÉRDIDA DE ARENA DE LA PLAYA

El Catedrático de Puertos y Costas Universidad Politécnica de Valencia, José Serra Peris, ha explicado que el objeto de estudio de este proyecto piloto es comprobar el efecto que esta barrera de arrecifes artificiales tiene en la estabilidad de la playa. “La barrera abriga la playa y reduce el transporte de sólidos, la pérdida de arena; por lo que podría ser un modelo para el mantenimiento y la sostenibilidad de las playas del Sur, Pinedo, El Saler y La Devesa”, ha asegurado. Tal como ha adelantado Serra, serán necesarios varios años de experimentación para comprobar el efecto real sobre las playas, aunque la colonización por parte de peces y vegetación marina es mucho más rápida, y se irá comprobando inmediatamente.

El proyecto ha contado con la colaboración de diferentes instituciones y organizaciones, como el Ayuntamiento de Valencia, los Ministerios de Agricultura, Alimentación y Medioambiente, de Fomento y de Interior; la Generalitat Valenciana; la Marina Real Juan Carlos I; la Federación de Vela de la Comunitat Valenciana, la Autoridad Portuaria de Valencia y la Cofradía de Pescadores.

El Alcalde en Funciones, Cristóbal Grau ha destacado “la excelente coordinación de todas administraciones en este proyecto que surgió hace dos años a raíz de la colaboración con las federaciones deportivas de actividades subacuáticas, para dar respuesta a las necesidades de los más de 12.000 buceadores de nuestra comunidad”.

Las estructuras de hormigón han sido diseñadas con formas diversas para hacerlas más atractivas, tanto para los buceadores como para los peces. Así, se han sumergido un arrecife con forma de ánforas, un segundo que recrea l’Oceanogràfic, y el tercero, reproduce los aros olímpicos. El presupuesto total de las tres piezas asciende a 25.000 euros, aunque tal como ha subrayado Cristóbal Grau, el coste real es mayor “por la suma de esfuerzos y recursos de todas las entidades implicadas”. De hecho, el Alcalde en Funciones ha agradecido el trabajo de todas las instituciones comprometidas en este proyecto pionero: Universidades, Generalitat, Gobierno de España, servicios municipales, Autoridad Portuaria, Cofradía de Pescadores, Federaciones deportivas, y Salvamento Marítimo.

El Edil ha concluido animando a los amantes del deporte subacuático “a disfrutar ya mismo de esta nueva instalación, a sólo 200 metros de la línea de costa, buceando tanto en apnea como con escafandra”. “A lo largo de esta semana finalizarán los trabajos, y el entorno quedará a disposición todos aquellos que lo deseen”.