El incierto futuro del Hércules tras el descenso

Nadie podia imaginar que, a principio de temporada, el Hércules acabaría descendiendo a Segunda División B. De poco valió este fin de semana la victoria ante el Mirandés y el buen juego mostrado durante el encuentro ya que, quien juega con fuego, se acaba quemando. El equipo alicantino ardió en las llamas de la Segunda B.

Un drama casi sin precedentes, ya que una paupérrima segunda vuelta de Liga Adelante ha hecho que el equipo alicantino descienda. La destitución de Quique Hernández, unida a una falta de comunión entre Jokanovic y los suyos, han hecho que el equipo alicantino dejara escapar más de la mitad de los puntos disputados, consumando un descenso de categoría que deja al club muy tocado económicamente. Once partidos sin ganar con Quique Hernández, unido a una mala planificación deportiva en la que muchos jugadores han demostrado tener discrepancias hicieron que el equipo tuviera todas las papeletas para bajar.

Ahora, su estructura profesional que se ve ahora atacada por la falta de liquidez y las deudas, y hay quien ya compara la situación del histórico equipo alicantino con la del CD Castellón, que ahora mismo se encuentra sumido en Tercera División, sin opciones por subir e intentando salvar la categoría -esta temporada ha quedado en decimosexta posición-.

Por ello, desde Alicante, muchas son las voces que piden la cabeza del actual grupo directivo y un saneamiento de unas cuentas que estuvieron -y todavía están- bajo sospecha.

Sin lugar a dudas un drama institucional para un equipo que lleva varias temporadas coqueteando con un descenso que se ha hecho una realidad esta temporada. Ahora falta por ver si las cuentas salen en el Grupo III de Segunda División B y, sobre todo, si el equipo es capaz de adaptarse deportiva y económicamente a la difícil categoría de bronce del fútbol español.