Kempes ya fue el protagonista en la primera visita del Rayo

Marcó cuatro goles en un encuentro que finalizó 7-0

Jose Hernández | 28 SEPT. 2013 | 07:08

El Valencia recibirá mañana al Rayo Vallecano en la séptima jornada del campeonato nacional de liga. El encuentro contará con la presencia de Mario Alberto Kempes, que estrenará su cargo de embajador internacional del club y que fue el gran protagonista en la primera visita que el equipo madrileño realizó a Mestalla en 1978; el día en el que el “Matador” acabó con el “Matagigantes”.

La presencia de Kempes en Valencia siempre es noticia en un club que sigue venerando a su estrella más universal. Pocas figuras consiguen crear tal unanimidad entre la afición valencianista como la del “Matador”. Este hecho es debido a actuaciones tan majestuosas como la que tuvo lugar el 8 de abril de 1978, hace poco más de 35 años. Aquel día el Rayo Vallecano entrenado por Héctor Nuñez recibiría uno de los castigos más grandes de su historia.

Mario Kempes

Lo cierto es que en Mestalla existía ambiente de revancha por el resultado acontecido en Madrid en la primera vuelta. Un recién ascendido como el Rayo había batido al Valencia 3-0 en una tarde aciaga para los intereses del club ché. Y es que el tercer equipo de Madrid se había ganado las simpatías del fútbol español tras protagonizar un arranque de liga sensacional. Ganaron al Sevilla 4-1, al Real Madrid 3-2, al Athletic también 3-2, y certificaron su gran momento venciendo al Valencia de Marcel Domingo a la semana siguiente por un contundente tanteo.

La derrota escoció de tal forma que varios jugadores tuvieron problemas al abandonar el estadio a la finalización del encuentro, uno de ellos Carrete. El asturiano se encaró a un delegado gubernamental en el túnel de vestuarios; el funcionario incluso le exigió identificarse antes de emprender el difícil viaje de retorno.

1977-78 fue la temporada del segundo Trofeo Pichichi conquistado por Mario Alberto Kempes, la del debut de Felman y la consagración como titular de Ricardo Arias. El equipo empezó muy mal, colista de la clasificación tras perder ante el Atlético de Madrid. Más tarde se alternaron goleadas a favor con bruscos resultados que crearon en el club una preocupante inestabilidad.

Un mes antes de jugar por primera vez frente al Rayo, el Valencia visitó el Santiago Bernabeu vestido con un equipaje legendario, el de la Senyera. El club se unía a las reivindicaciones autonomistas que se vivían en la época y daba un paso más, comprometiéndose con la causa en una visita que siempre era especial. Como era de esperar, en Madrid no sentó demasiado bien la idea del Valencia, y el público pitó la salida de los Kempes, Diarte, Castellanos o Botubot. Ganó el Real Madrid gracias a un polémico penalti que agudizó la crisis deportiva del equipo Ché.

Mario Kempes ante el Rayo

Pero al filo del ecuador de la temporada, el Valencia enderezó la situación encadenando varios encuentros sin ser derrotado. El más destacado de todos fue la victoria ante el Barça de Rinus Michels con un tanto de Saura; el objetivo era alcanzar una plaza europea y cada vez estaba más cerca. En plena escalada de triunfos, el Rayo Vallecano debía visitar Mestalla a principios del mes de abril de 1978. El Valencia venía de ganar a un Sporting mermado por la baja de Quini y al Elche en el nuevo Altabix. Se esperaba la visita de un Rayo que estaba pagando con creces su inexperiencia y que ya había dejado de ser el Matagigantes muchos meses atrás.

Con el Rayo llegaba el “Palomo” Héctor Núñez, todo un mito de la entidad en los años sesenta e integrante de la línea de ataque valencianista que conquistó dos copas de feria en esa época Su Rayo no jugó mal durante los primeros minutos, pero pronto se desmoronaría ante la fortuna del conjunto local, una suerte cargada de color argentino.

Felman y Kempes destrozaron al Rayo. El primero con dos goles que abrieron el camino en la primera mitad, el segundo con un hambre insaciable en el segundo tiempo que le acercaba al trofeo de máximo goleador. Mario Kempes tomaba posiciones de la mejor forma que sabía de cara a la cita de Argentina 78: marcando goles.

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El 7-0 final (con cuatro de Kempes) no dejó lugar para la duda, y permitía al Valencia tomarse cumplida revancha del tropiezo de Madrid en la primera vuelta. Al final de 1977-78 los de Marcel Domingo fueron cuartos (clasificándose de nuevo para la Copa de la UEFA) y el Rayo terminó en una excelente décima posición. 35 años después llega un Rayo muy endeble en la parcela defensiva que podría volver a sumar un importante castigo. La grada de Mestalla volverá a ser una caldera, aunque no perderá ojo al gran protagonista del primer Valencia-Rayo de la historia, Kempes...el hombre que vuelve a casa.