Cuando Ricardo Arias habla, los demás, escuchamos

"No me cabe en la cabeza que un club que habla de tanto señorío como el Madrid consienta que un jugador monte los tinglados que monta". Las palabras son de Ricardo Arias, mito del Valencia por derecho propio, y que ha puesto voz a lo que piensa mucha gente, muchísima, incluidos en Madrid, respecto a un niñato que ha intentado hacer un daño terrible al club de Mestalla a la sociedad valenciana en general. Y eso, claro, no se lo vamos a consentir.

Porque Vinicius quedó retratado ante el Valencia como lo que es, un provocador, un tipo que vive del conflicto, un personaje que se ha montado su propia película y que va a perjudicar a mucha gente en su camino. Lo que se intentó hacer en nuestro campo, primero con Netflix y luego metiendo espontáneos cámara en mano grabando a niños de 7 años, habla por sí solo de todo el circo que había, de lo que se pretendía hacer ver que pasaba en nuestra casa.

Arias es uno de los tipos más rectos y honestos que he conocido en mi vida, y no lo digo sólo porque sea mi amigo, que lo es. No le duelen prendas en hablar bien de otros equipos cuando toca, pero lo que no va a hacer es soportar que un crío insolente se ría de nosotros. Me pregunto qué hubiera pasado si eso que hace Vinicius hubiera pasada hace 35 años, con Richard sobre el terreno de juego. me le pregunto y casi mejor no me lo contesto.