Varios golpes de efecto que necesitaba el valencianismo
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Varios golpes de efecto que necesitaba el valencianismo
El club necesita algo más un buen resultado o el fichaje de un jugador mediático para salir de la crisis, pero es innegable que este verano se han dado pasos
Si tuviéramos que definir el estado actual del valencianismo con una palabra esa sería la de expectación. Ni siquiera nos atrevemos a decir ilusión ya que la afición se ha llevado demasiados golpes en los últimos años y el camino a recorrer es largo para tratar de recomponer a un club que pasa por horas bajas. No obstante, a pesar de las voces críticas también es justo reconocer que en estos meses se han dado varios pasos que al menos invitan a pensar en positivo.
Un entrenador ambicioso que no teme al entorno
No solo no lo hace sino que trata de escapar del sector que solo percibe negatividad. Gattuso se ha ganado a la plantilla, empieza a dotar de su sello al equipo y el discurso cada vez convence más. No es un técnico al uso en cuanto a imagen y tiene la suficiente experiencia como para saber que solo con trabajo y humildad se pueden hacer cosas importantes.
Un lavado de cara interno
Obviamente Lay Hoon no es la persona ideal para conectar con el valencianismo, pero si tenemos que hacer una comparación entre su manera de proceder y las costumbres de Anil Murthy no encontraríamos comparación posible. Repetimos, hay mucho que mejorar pero el hecho de que el Valencia CF haya abierto las redes y trate de acercar al equipo a los más jóvenes con entrenamientos abiertos es un paso importante.
Una figura que ilusiona
El fichaje de Cavani ha llenado de orgullo al valencianismo, está por ver lo que el uruguayo puede aportar en el terreno de juego pero su incorporación ha sido un golpe importante a nivel mediático y de marketing. Cavani ilusiona y se cuentan los días para el debut.
Continuidad a un grupo joven y comprometido
Una de las imágenes más bonitas de la última final de copa fue presenciar como la afición valencianista reconoció el trabajo e implicación de los jóvenes. Es la mejor noticia en tiempos de crisis, y a pesar de las ventas de Guedes y Soler este grupo de hambrientos futbolistas conecta con la afición, Mestalla ha vuelto a ser una caldera en solo tres partidos.