Nadie tenía ni la menor idea de lo que iba a pasar con el Valencia en Singapur

Nadie en Valencia habla con Peter Lim y todos saben lo que piensa y lo que va a hacer. Quizá ese "nadie" sea un tanto inexacto, porque hay gente, muy muy poca,m que sí tiene contacto, pero vamos, es residual, y no cuenta nada. Con lo que podemos ser más precisos si decimos que con nadie valenciano, o del Valencia de aquí, o como se quiera llamar a la forma de comunicación que tiene el máximo accionista de la entidad de Mestalla que, cuanto menos, resulta bastante particular, por no decir otra cosa peor.

Es quien manda, quien toma las decisiones más importantes, y el que decide lo que se hace y lo que no, siempre atendiendo a lo que lleva en la cabeza y nunca (o casi) pensando en el tema deportivo, que debería ser lo que primara en todo esto. Nadie sabía que iba a venir Corberán y nadie sabía que iba a venir Gourlay, lo mismo que nadie sabía que Kiat iba a ser el presidente. Y nadie es nadie, por más acrobacias que se quieran hacer.

Eso implica que muchas cosas de las que se dicen ahora mismo sobre el mercado, y sobre lo que no es el mercado, pues hombre, como poco las tengamos en cuarentena, aunque ya sabemos cómo funciona ahora todo, es decir, yo la suelto, y si luego es otra cosa, rectifico sobre la marcha y ponga otra historia, no hay problema. Pero lo que nadie puede discutir, por más que se empeñen, es que no se sabe lo que va a pasar, nunca.