Cuando los suplentes del Valencia aportan soluciones

Uno de los grandes problemas del Valencia estaba siendo que los suplentes no aportaban lo que hacía falta. Con Baraja y con Corberán, que no ha sido exclusivamente del Pipo, que ahora parece que tenga la culpa de todos los males que nos han acechado este año.

El equipo jugaba buenas primeras partes, incluso tramos de las segundas, pero hacia el final, cuando se hacían los cambios, se caía, y no pocas veces. Incluso hemos visto en varias ocasiones que no se han hecho todos los cambios cuando quizá el encuentro lo requería, y eso no dejan de ser mensajes claros por parte de la dirección técnica.

Llevamos ya unas cuantas jornadas en las que el equipo no sólo no se viene abajo en la segunda mitad, sino que gana partidos o suma puntos en ellas, y eso es algo que se tiene que poner en valor igual que hasta ahora se ha criticado de forma mucho más que justa.

Que hay mejor plantilla ahora que antes de Navidad es algo que todos tenemos claro, o deberíamos tenerlo, y eso, obviamente, también esta ayudando a que esto pueda suceder de un modo mucho más frecuente. 

Cuando lo que sale del banquillo tiene más nivel, siempre es más fácil que los partidos se puedan decantar a nuestro favor. Y eso, más allá de jugadores o entrenadores, depende también en gran medida de la inversión que quiera hacer la propiedad, porque sin eso, antes o después, estaremos de nuevo en las mismas que hace unos meses, por desgracia, y a sabiendas de todos.