Valencia CF, el último de la clase sin el apoyo de Mestalla

Varios debates han vuelto a la palestra tras el decepcionante rendimiento del Valencia ante el Atlético de Madrid. El primero de ellos está relacionado con la debilidad psicológica que tiene el equipo, se hunde demasiado en los malos momentos y cae en el exceso de confianza cuando se consigue un pequeño logro (el empate en La Ceramica no fue más que un pequeño paso). 

El segundo aspecto es totalmente censurable, ya que no es la primera vez que el equipo sale con poca ambición ante los teóricos poderosos, en primera división hay que luchar todas las batallas por muy complicadas que parezcan, hace mucho tiempo que este equipo no ofrece guerra ante los grandes. Y por último tenemos que hablar de lo que viene, que es volver a jugar lejos de Mestalla.

Encomendarse a la ayuda de la grada es un argumento demasiado pobre para creer en la permanencia, no basta con sumar en casa ante rivales de la parte baja. El Valencia es el segundo peor equipo de La Liga a domicilio igualado con el Espanyol, pero el único que todavía no ha ganado. El balance es desolador, con cinco raquíticos empates y nada menos que siete derrotas. Si nos detenemos en el balance goleador los datos son de conjunto pequeño, un durísimo -17 (entre goles a favor y en contra). En Pamplona llegó el último triunfo lejos de Mestalla en el mes de abril, la plantilla debe asumir de una vez la necesidad imperiosa de dar la cara y ganar partidos como visitante.