El Valencia está superado, en todo, por todo, todos

El Valencia está mirando a los ojos al descenso a Segunda. Que era algo que podía pasar se sabía desde antes de comenzar, lo mismo que el curso pasado, pero se están dando una serie de carambolas extrañas, de factores marcianos, de errores, de fallos, de mala suerte, de arbitrajes, de malas decisiones... De todo, de todo eso que le pasa a los equipos que se acaban yendo al pozo, que es ahora mismo en la circunstancia en la que estamos.

Veo a Baraja y al equipo mal, que lo intentan, claro, que no bajan los brazos, que no se rinden, pero que están como dando vueltas en círculo, y eso, evidentemente, siempre te deja en el mismo sitio. Algunos acabaron el partido llorando... en la jornada 10, y eso, los que pelean por no bajar, no lo hacen hasta la 38, si es que terminan descendiendo. Hay angustia vital, congoja, y eso es algo que no se puede entrenar, que no se puede trabajar.

El puñetero fútbol es ganar partidos, no hay más. Si no lo haces, todo lo demás da igual, porque realmente no sirve para nada. Hay que hacer algo, no sé el qué, pero debe pasar alguna cosa, un golpe de timón, porque el maldito fútbol tiene estas jodidas reglas. ¿Es echar a Baraja? No lo sé, y no lo quiero, y no tengo claro que pasando eso todo cambiara. Es mi equipo, es el nuestro, y no puedo pensar otra cosa que no sea que lo vamos a sacar.