Echo en falta "miedo" en el entorno del Valencia, el del año pasado

El gran objetivo del Valencia es no bajar a Segunda División. Al menos para empezar. Y en esto hay que ser muy fríos y tener la piel poco fina. Porque decir estas cosas no implica aceptarlas ni que te gusten, ya que simplemente constatan una realidad palmaria generada por la absurda política deportiva a la que nos tiene sometidos el máximo accionista. Y ya una vez con eso claro, para el que quiere tenerlo, podemos pasar a lo realmente importante.

Seguimos con carencias, con muchas, porque apenas si han llegado dos fichajes al equipo, y todos andamos con la mosca detrás de la oreja pensando en las ventas que aún no se han hecho... pero que sabemos que se van a terminar haciendo irremediablemente. La pretemporada, a nivel de resultados, no está siendo buena, y está dejando claro que atrás andamos cojos, y más sin Mosquera, y en los costado necesitamos gente como el comer.

No podemos estar repitiendo cada 30 segundos que estamos abocados al desastre, pero sí debemos tener todos una tensión que nos haga dar ese plus que fue esencial para tener un buen año la campaña pasada... viendo el potencial de la plantilla. Quedan semanas de mercado, sí, pero eso no es garantía de nada, o incluso, puede ser garantía de algo negativo, en forma de salidas que luego no se vean compensadas con las oportunas llegadas.