El viejo truco de intentar confundir a Meriton con el Valencia

Eso de intentar que Meriton y el Valencia sean lo mismo, además de viejo, no tiene ni pues ni cabeza. Y son muchos años diciéndolo, pero como veo que sigue siendo una especie de comodín del público, que no lo entiendo, pues habrá que persistir en que no, en que la propiedad es una cosa, y además efímera, y la entidad, con más de 105 años de historia, y los que quedan, otra totalmente distinta.

Y yo entiendo que sin ese trampantojo futbolístico el relato pierde fuerza, porque claro, es más fácil decir que el ayuntamiento da a Lim, o le niega a Lim, que decir que lo hace con el Valencia, que es la realidad, pero si seguimos cayendo en la trampa, y lo de trampa es una manera muy amable de llamarlo, nos seguiremos engañando de una forma lamentable.

No, no y mil veces no, el Valencia es una cosa y Meriton, gracias a Dios, otra totalmente distinta, y como eso no va a cambiar de ninguna de las maneras, mientras siga pasando, mientras el argumento sea una especie de ariete, simplemente habrá que recordar cómo son las cosas, sin más, con ninguna pretensión de discutir o de tener razón, y menos de convencer a nadie de algo que sabemos que no va a dar marcha atrás.

Pero pensemos en que un día, más pronto que tarde, Lim no estará, y que el daño que se le haya hecho a él, o eso se dirá, sólo irá en contra del Valencia y de su presente y su futuro. Entonces vendrán los lloros y las lamentaciones, nadie tendrá la culpa, pero estaremos peor que ahora. Y ya no será el Valencia de Lim… porque de alguna manera, nunca lo ha sido.