El Valencia juega un mal partido y el árbitro le da la puntilla

Un Valencia - Alavés con Mestalla buscando Europa hasta el final. Esa era la previa en un campo de nuevo lleno, y con los resultados de la jornada adversos, ya que la Real y el Betis habían ganado sus partidos. Mismo equipo que el lunes en Barcelona, salvo Jaume por Mamardashvili, y la necesidad de volver a ganar. El equipo salió bien, y en el 5, después de una buena jugada de Peter, y una medio dejada de Hugo Duro, Diego López remataba alto cuando lo tenía todo de cara. En la siguiente jugada, ellos la mandaban a la cepa del palo con un remate de Kike, solo en el área.

En el 10, otro llegada nuestra entre Duro y Almeida, que terminaba con remate del luso contra la defensa. Pasado el minuto 25, el encuentro había caído bastante, ellos con dos amarillas, y nosotros pudiendo correr poco. En el minuto 33 se marchaba lesionado Jaume, con lágrimas en los ojos, porque después de volver a Mestalla casi dos años más tarde, caía lesionado después de que casi en la primera acción del partido quedara tocado. El fútbol es muy duro con algunos jugadores. No pasó nada más hasta el final del primer tiempo, y eso que hasta se dieron 4 de añadido. Mucho que mejorar en el equipo de cara al segundo acto. 

La segunda parte empezaba con cambios, Canós por Almeida, y un remate del de Nules al palo en el segundo 30 de ese periodo, tras una gran jugada de Federico. Mala suerte en esa acción, pero buen arranque. Ellos también pegaban fuerte, y Rivero tenía que hacer una muy buena parada en el 51 en una contra visitante. El partido seguía raro, mucho, y a eso había que ponerle remedio. En el 55, Jesús luchaba un balón que parecía perdido, llegaba a linea de fondo para poner un buen centro, y Hugo Duro no llegaba por medio palmo cuando estaba en boca de gol. Aunque en la siguiente, ellos de nuevo lanzaban otra contra que no era gol por otra buena parada de Rivero.

En el 65 pasaba algo en el partido, y era el cambio de Cenk por Jesús Vázquez, tocado, porque ni unos ni otros hacían nada que fuera reseñable. Nos faltaba fútbol, pausa y llegada. Y en el 68, en un córner que no era, el Alavés hacía el 0-1 con un remate al segundo palo que no vio nadie. Error defensivo muy grosero. En el 74, el VAR anulaba un gol a Diego López no sabemos la razón, y un minuto más tarde, Thierry y Peter se iban del campo por Foulquier y Yaremchuk. En el 82, el ucraniano remataba un centro lateral de Foulquier y enseñaba el camino de lo que debía ser el final del choque. A la contra nos pudieron matar en el 92, pero el remate de Simeone se marchó fuera. Quedaban 6. Pero no nos dio para más. Derrota que marca el casi final del año, y ahora toca tomar decisiones.