Cómo tirar a Peter Lim del Valencia, cuando ha fallado todo

“Cuando acabe la Liga vamos a tirar a Peter Lim del Valencia”. La frase creo recordar que es textual, y si no lo es, se aproxima mucho a esa realidad. Ya hace más de un mes que el campeonato terminó, se ha hecho otra manifestación multitudinaria, se han llevado a cabo varias denuncias, todas desestimadas, y como sabemos, el máximo accionista del club sigue en el mismo sitio, sin alterarse lo más mínimo y sin que nada, al menos de forma aparente, haya cambiado de forma estructural.

Digo de forma aparente porque en el club quieren que hablen los hechos, y yo también, como todos, y hay que esperar a que estos se produzcan. Pero yendo al grano del asunto que se pretende tratar, eso de “tirar” a Lim, que como concepto ya hemos dicho muchas veces que tiene cabos sueltos por todas partes, ha quedado claro que es poco menos que un imposible, y eso no significa que nos guste, porque sólo estamos recalcando una evidencia.

Aquí las cosas cambiarán el día que un inversor venga con la intención clara de comprarle sus acciones a Meriton, y mientras eso no pase, que no está pasando en este momento, la situación va a cambiar cero. “¿Entonces no hacemos nada y nos quedamos callados?”. Nadie está diciendo eso, pero ya hemos visto el resultado de todos los movimientos sociales que se llevan orquestando desde hace 3 años, sin quitarle un ápice de mérito a aquellos que han trabajado de forma firme en pos de conseguir algo que era imposible.

La idea de cambiar la estrategia, de apretar para que la gestión sea distinta, algo que muchos valencianistas importantes ya han dicho de forma pública y por lo que se han llevado palos como castillos, sigue siendo lo más sensato. Eso y acabar el estadio, y veremos como lo demás es un proceso de furia madura.