Una lona para Carlos Marchena, leyenda del Valencia

Lo de las lonas a las leyendas del Valencia en Mestalla sé que es un tema delicado, mucho, y que se resuelva como se resuelva, siempre habrá injusticias, que por eso llevo diciendo años que podamos 40 más… o que las quitemos todas. Pero hay algunos casos que son especialmente delicados, y que suponen una injusticia muy importante. Carlos Marchena, para mí, es uno de ellos de forma clara. 9 años en el equipo, 319 partidos jugados, 11 goles marcados, 2 Ligas, 1 Copa del Rey, una UEFA, una Supercopa de Europa… una pieza básica en el mejor Valencia de todos los tiempos.

Además, siendo valencianista, logró ganar con España una Eurocopa y un Mundial. Salió del club como salió, y por culpa de quien salió, y dejó una frase maravillosa de la que me acuerdo muchas veces: “si con mi venta se puede poner un ladrillo en el Nuevo Mestalla, la daré por buena”. La frase tiene casi 13 años, por cierto. Además de todo esto, que son méritos mucho más que suficientes para estar en esa tribuna del campo, hay otras cosas que se deben poner en valor. En 2008, con su amigo Baraja, fue quien metió en cintura a un vestuario en llamas para no irnos al carajo. Y en 2023, otra vez con su inseparable 8, volvió al club para que no volviera a pasar lo mismo.

Compromiso, sentido de pertenencia, amor al Valencia y respeto por el escudo, no se puede pedir nada más. No digo que haya que montar ninguna campaña, que ahora mismo el patio no está para estas cosas, pero creo que, cuando acabe esta pesadilla, pase lo que pase y sigan o no en el Valencia, con Marchena se debe reparar una injusticia manifiesta que ha durado muchos años, y que ha sido culpa de muchas circunstancias que nada han tenido que ver con él.