El Valencia de Layhoon Chan

El Valencia actual, el de Layhoon Chan, tiene muy poco que ver con el que había hasta el mes de mayo. Y decir lo contrario es algo que se puede y se debe respetar, pero es que, simplemente, no es así. No han pasado muchos meses pero han pasado muchas cosas, y es posible que haya habido menos cambios de los que todos quisiéramos, pero sí se han dado muchos que eran necesarios.

Que el relato tenga que ser siempre darle cera a Lim y todo lo que huela a él está bien, la costumbre se hace ley, pero empecinarnos en cosas que no son, simplemente por el hecho que si fueran nos vendría mejor, no tiene sentido alguno.

Con la que fuera primera presidenta de la historia del club, aunque no con mucha estridencia, las cosas están yendo en el camino correcto, yendo, simplemente, a donde deben ir. En el Valencia no puede haber esta guerra social, no podemos ser el hazmerreír de todo el mundo, no podemos incumplir nuestra palabra, no podemos dar un imaginen tan lamentable como la que hemos ofrecido muchas veces en este tiempo. Y eso ha cambiado.

Y ahora no vamos a reuniones a montar un numerito, sino con un plan muy claro, que molesta a muchos porque igual preferían seguir viendo a Murthy y sus declaraciones de barra de bar, porque eso convenía al maldito relato. Y ahora se molestan porque el club defienda sus intereses, porque se proteja, porque hable claro y sin miedo, y con hechos. 

Layhoon es otro rollo, completamente distinto, y eso lo sabemos todos. Y por eso dije durante semanas que ciertos silencios reveladores, eran la muestra más clara de que las cosas iban en otra dirección. Y queda mucho por hacer, pero mucho, pero si un día no se da el primer paso, no vendrá nunca el segundo. Y eso NO puede molestar a nadie, porque si nos dolía tanto el Valencia, nos tiene que alegrar que ahora nos duela menos.