La capacidad del Nuevo Mestalla y otras estupideces para justificar posturas extremas

Que el Nuevo Mestalla tenga que tener 70.000 espectadores de capacidad es un capricho de niño pera. Y de este burro no me bajo porque sé que tengo razón, y ya no es lo piense piense quien suscribe, es que cada vez hay más voces que se alzan preguntándose la razón por la que hay que ir a una capacidad que no tiene sentido, que está basada en sueños de grandeza que terminaron con el club al borde del abismo, y que es algo a lo que obligan políticos que no piensan poner un duro en el futuro campo. Es que no se sostiene. 

Este fin de semana lo volvía a pensar a cuenta del derbi de la ciudad de Madrid. El Metropolitano tiene cabida para 68.456 espectadores. No llega a 70.000, por cierto. Y en el partido contra el Madrid, que todo el mundo era de la misma ciudad, entraron 66.500 personas. Pero nosotros tenemos que irnos a lo que digan algunos políticos que quieren sacar pecho por aspirar a un partido de un Mundial del que España aún no es ni sede. Y para eso quieren condicionar la casa del valencianismo, que es algo que nos puede durar 100 años. Acojonante.

¿Queréis ser del Mundial? Fenomenal. ¿Necesitáis un campo 27 estrellas con 200.000 butacas? Os lo pagáis vosotros, así de sencillo. Al Valencia le costó un descenso y muchas más cosas el engaño del Mundial 82, cuando nadie pagó aquellas remodelaciones y nos comimos nosotros el marrón. Ahora no puede pasar lo mismo de ninguna manera. Las posiciones estas de enroque social por puro postureo, con dinero ajeno, están muy bien, pero cada vez hay menos gente que le ve el sentido... porque igual es que no lo tiene.