Cuando una derrota del Valencia se saca de contexto

El Valencia no mereció perder por 0-3 contra el Betis, pero como somos un equipo blando al que todo le afecta al extremo, cuando el partido estaba para el 1-1 hacía rato, nos acabaron pintando la cara en nuestra casa. Si sólo hablamos de fútbol, el resultado es irreal, todos lo sabemos, pero ahora mismo tenemos los nervios a flor de piel porque nadie tiene claro lo que pasará el año que viene, existe un miedo por desgracia fundado, y que te pasen estas cosas en tu estadio no le gusta a nadie, no nos vamos a engañar.

Este deporte es tan cabrón, porque es así, que si hubiéramos ganado la Copa del Rey y hubiéramos conseguido la calificación para Europa, seguramente el Betis nos habría ganado de igual modo, porque ellos se estarían jugando aún más que ayer. Habríamos levantado el pie de la misma forma, seguramente Meriton habría comprado a Hugo Duro "sin avisar" y todo lo demás... y es posible que no se le hubiera dado la misma importancia que ayer. Pero conforme están las cosas, esa derrota es como si todo hubiera pasado de repente.

Ganar o perder en lo que queda de año sirve para lo que sirve, eso lo sabemos todos, pero está claro que irnos con peor cuerpo que llevamos será poco menos que insostenible. El último partido en Mestalla va a ser muy duro, como no puede ser de otra manera, y es por eso que la puesta de pilas que debe hacerse Meriton ni la saben. Y aún así. Pero que la excusa para flagelarse sea el 0-3 del Betis, y más como se dio, sinceramente, no lo veo justificado por es un marcador mucho más que engañoso. Tenemos otros muchos motivos para cabrearnos, incluso mucho más, y sin duda, más reales.