Un debate en el Valencia que cobra peso

Bryan Gil no es titular desde el día de la derrota ante Osasuna, su suplencia en Villarreal era previsible ya que todo el mundo contaba con su presencia en el once de la final. Más llamativas fueron las suplencias ante el Betis y el Levante, está claro que el jugador no termina de convencer al 100%a Bordalás y en la final prefirió utilizarlo como revulsivo antes que como punta de lanza de inicio. Puede que haya sido algo circunstancial pero no podemos esconder que la incidencia de Bryan en el juego del equipo ha ido de más a menos.

Está condicionado por el sistema pero también por su rendimiento en el terreno de juego. Nos encontramos con un futbolista con grandes condiciones técnicas pero en momentos desaprovechadas. Bryan Gil necesita un reciclaje en su fútbol y después de verle jugar en Mestalla no sorprende tanto que el Tottenham le considerara secundario para un juego tan explosivo y físico como el de la Premier. En cuanto a números Bryan Gil contó desde el primer momento, 630 minutos en liga y 280 en copa, siendo revulsivo en la final pero no decisivo para lograr el triunfo. Escuece más que no haya sido capaz de estrenarse como goleador y en el área haya sido muy poco determinante.

El hecho de que haya cumplido sin convertirse en estrella puede ayudar a destensar las conversaciones con el Tottenham y alargar la cesión, pero las suplencias de los últimos encuentros abren el debate aunque el técnico le restó importancia en rueda de prensa. Los partidos que juegue Bryan Gil de aquí a final de temporada es uno de los alicientes que restan esta campaña.