¿Qué representa la Copa del Rey para este Valencia?

El Valencia vivió su centenario hace solo tres años, no fue una temporada sencilla pero terminó de la manera más apoteósica posible, levantando un título en Sevilla que varias generaciones no olvidarán al ser el primero que vivieron. Todo parecía encaminado a que aquello fuera el principio de otra época dorada, o al menos estaba claro que se habían puesto los cimientos de algo muy bueno. Lo que ocurrió en pocos meses lo conocemos todos, Peter Lim decidió apretar el botón rojo y desconectar de cualquier decisión sensata y el Valencia se hundió en la mediocridad.

Los malos resultados deportivos llevaron a la desafección de gran parte de los aficionados, y por supuesto la pandemia no ayudó. Las imágenes de Mestalla vacío eran la continuidad de un club desamparado por sus dirigentes, la llegada de Bordalás dio algo de impulso pero el Valencia seguía herido. Y en medio de todo ello apareció esta Copa del Rey que se ha convertido en un motivo para creer pero también en la excusa para volver a ilusionarse. Había muchas ganas y aunque los problemas de fondo seguirán estando, pensar en un desplazamiento masivo a Sevilla es una cuestión lo suficientemente estimulante como para ser conscientes de todo lo que se juega el Valencia esta semana.

El valencianismo se ha unido defendiéndose de las críticas, y ante el Athletic Mestalla volverá a parecerse mucho al de las grandes ocasiones. Todo está preparado para una noche que en caso de que tenga final feliz no liberará a la entidad de su miserias, pero una alegría y un partido histórico es justo lo que necesita el valencianismo.