Gabriel Paulista y su rol en este Valencia

Gabriel Paulista debe ser alguien muy importante en el Valencia actual. Después de estar varios meses fuera por lesión, algo a lo que no nos tenía acostumbrados, hemos llegado casi a “olvidar” un tanto su rol, y eso es algo que no nos podemos permitir. No creo que sea el mejor central de la historia del club, aunque ese debate deportivo es otro, pero sí entiendo que es uno de los más comprometidos que he visto, y eso en circunstancias poco favorables, cuando veía marcharse a muchos de sus compañeros en años muy buenos para el equipo.

Él decidió seguir, conseguir por fin la doble nacionalidad (aunque luego Luis Enrique le dejó tirado en la lista para la Eurocopa) y ampliar su contrato hasta poco menos que un tiempo en el que ya esté pensando más en la retirada que en otra cosa. Lleva sin pisar el césped en partido oficial desde el 30 de octubre, cuando ganamos al Villarreal en Mestalla por 2-0, y fue cuando se lesionó. El equipo había recibido 17 goles en ese momento (jornada 12), aunque en 3 de ellos (Betis, Mallorca y Sevilla) concentró 10. Es decir, en 9 partidos había recibido 7 tantos. Con esos números se puede pensar en muchas cosas, y no sólo en sufrir, es evidente. Paulista, lo mismo que el resto de defensas titulares, estuvo en el mejor momento del equipo, y su ausencia ha significado 25 goles encajados en 13 encuentros, una media de casi dos por partido.

Vamos, un disparate. Pero lo que Paulista aporta al equipo va mucho más allá de eso, porque al final son galones, garra, ese oficio del que hablamos muchas veces aunque él mismo se equivoque algunas veces. Este Valencia, tal y como estamos ahora mismo, necesita a gente como él, con su nivel de compromiso, entrega y conocimiento de dónde está, porque eso también es un ejemplo para los muchos jóvenes que tenemos, y eso no lo podemos obviar. Parece que por fin ha llegado su momento, que incluso lo podremos ver el miércoles contra el Athletic. Ojalá y pueda contagiar al grupo de todo lo que pueda dar… y de lo que nos hacen falta.