Dos fichajes "bomba" del Valencia a precio de saldo

El Valencia hizo el pasado verano dos fichajes “bomba” a precio de saldo. Porque las operaciones hay que ponerlas en perspectiva, y si nos vamos a todos al momento en el que vinieron Omar Alderete primero y Hugo Duro después, el que levante la mano y diga que estaba seguro que iban a triunfar, igual le podemos tildar de oportunista… y hasta de ser un poco mentiroso. Que podamos firmar un central de jerarquía y de 25 años recién cumplidos el pasado mes de diciembre, y un delantero polivalente que tiene gol y trabajo de apenas 22 hechos en noviembre, por unos 12 millones de euros a máximos (Alderete puede ser por menos de 8 en función de una serie de variables que están en su contrato), es algo que se debe poner en valor y resaltar por parte de quien haya negociado estos contratos y haya elegido estas opciones.

¿O también vamos a negar que hay un trabajo hecho por parte de mucha gente y que las elecciones se deben al consenso y al análisis, e incluso, ya para terminar de delirar, a los OK de Peter Lim? Que yo entiendo que decir que algo está bien hecho por parte del Valencia cuesta Dios y ayuda, pero por el amor de todos los santos, que no es el equipo de Meriton, es el nuestro, trabajan grandes profesionales que hacen grandes cosas, y que en ocasiones, porque el fútbol es muy cabrón, ven cómo llegan a salir bien.

Hacer estos dos fichajes, en un tiempo en el que los recursos económicos no son los más abundantes es algo capital, y que ojalá se vuelva a dar en muchas más ocasiones, porque ahora mismo necesitamos de este tipo de movimientos para poder crecer a bajo coste, y podernos permitir lujos como el de Bryan Gil, por no entrar en la renovación de jugadores como Carlos Soler o José Luis Gayà, que ese es otro tema del que vamos a seguir hablando hasta que se acabe cerrando, que es lo que todos queremos, ellos los primeros, por muchas cosas que se digan.  Pero Alderete y Hugo Duro, dos fichajes para darle la enhorabuena al que los parió.