Recuperar a Mestalla para la causa, un paso necesario

La pandemia dejó tocados a todos los clubes y en el caso del Valencia llegó justo en un momento más que complicado en el apartado social. Poco a poco se va recuperando la normalidad y aunque en el caso de Mestalla todavía no se ha podido recuperar el aforo completo el final de la pesadilla está más cerca. Pero no podemos achacar únicamente al problema sanitario la frialdad que ha acompañado a Mestalla en los últimos tiempos, la afluencia al estadio ha sido baja pese a que desde el club se dijo que la venta de abonos fue alta y sin duda Mestalla ha dejado de ser la caldera del pasado.

La disolución de la Curva Nord fue una pésima noticia para la animación en el estadio. Sin entrar a valorar las razones que condujeron a su disolución, lo que sí está claro es que el fondo sur del estadio era un auténtico hervidero de emociones que contagiaba al resto del estadio. Hay que recuperar parte de ese espíritu y la acogida de la venta de nuevos abonos de media temporada ha sido buena. Es un primer paso pero todavía no definitivo ni suficiente. A final de temporada sería positivo que todas las partes afectadas se sentaran y hubiera predisposición por parte del club para intentar construir una grada de animación en la que todos tengan cabida (no solo los más jóvenes) y de paso incentivar al resto de la afición a acudir en masa y apoyar sin descanso al equipo.

Sin un buen equipo será difícil volver a conectar a gente desencantada, pero sin un Mestalla volcado con los suyos en cada encuentro también costará mucho más devolver al Valencia CF al lugar que le corresponde.