Discutir a Carlos Soler en el Valencia es demasiada costumbre, y muy injusto

Es un tema ya muy manido, que esencialmente agota, porque es como la pescadilla que se muerde la cola y no parece tener fin

Toni Hernández | 12 DIC. 2021 | 08:30
Carlos Soler

Lo de discutir a Carlos Soler cuando no hace partidos de Balón de Oro con el Valencia empieza a ser una costumbre bastante fea, y bastante cansina. No termino de entender qué es lo que queremos de él, cuál es la razón por la que si no da dos asistencias y marca algún gol, en cada partido, es como si no hubiera jugado. Me parece terrible el tratamiento que se le da, y no entro ya en si es generalizado o no, que no hace demasiado lo era, sino que ni queremos ver los tiempos del fútbol ni tampoco tenemos especialmente claro que los futbolistas no son máquinas. Ah, y que Leo Messi hay solo uno, y hasta tiene días en los que, literalmente, va andando por el césped. 

Es por ello que los análisis a Soler son agotadores, porque no se valora nada de lo que hace a no ser que se trata de algo absolutamente excepcional. Y repito, es un grandísimo jugador de fútbol, pero me temo que nunca estará entre los 3 finalistas de ese Balón de Oro del que hablábamos al comienzo. Como le pasa a la inmensa mayoría de jugadores, no lo olvidemos. Soler es básico en el Valencia de Bordalás estando regular, y vale 50 millones de euros en una buena versión. Si da lo mejor que tiene, estamos hablando de uno de los tipos más importantes de la Liga.

Ponernos a valorar que no ha tenido vacaciones, que jugó del tirón muchos meses, que se lesionó, que forzó por el equipo y tuvo que volver a parar, que ahora los demás están rodados y él está en ello, parece que no tenga importancia. Es como si esto fuera estar jugando a la consola siempre, de forma constante, y que con apretar unos botones u otros pasan y dejan de pasar las cosas. El mejor Soler volverá mucho más pronto que tarde, y entonces se le volverá a elevar a los cielos… hasta que vuelva a no ser perfecto, y vendrá el ejército puntilloso a decir que “debe dar mucho más”.