31 días para que el Valencia acuda al mercado de fichajes, ¿o no?

Momento clave para decidir lo que se tiene que hacer en cuanto a llegadas y salidas, con mucho trabajo por delante en todos los sentidos

Toni Hernández | 01 DIC. 2021 | 07:30
José Bordalás

Empieza la carrera por el mercado de fichajes de invierno 2022, en el que el Valencia debe ser protagonista, o al menos, cerrar las operaciones de entrada y salida que el técnico y el director de fútbol tienen claro que se deben ejecutar. Hay futbolistas que saben que no cuentan nada, es evidente, y que tienen que salir por distintos motivos. Cristian Rivero debe ser cedido, porque es joven y termina de renovar, Jason Remeseiro y Álex Blanco no cuentan nada y terminan contrato el 30 de junio.

Manu Vallejo sabe que debe buscar una salida porque con Bordalás no tiene sitio en el equipo a no ser que haya muchas lesiones o gran necesidad, y Denis Cheryshev, que también acaba a final de temporada, tiene claro que lo va a tener muy complicado para contar con minutos viendo el rendimiento de Hélder Costa o Hugo Duro, y la recuperación de Toni Lato, que permitirá al técnico alicantino jugar en más de una ocasión con doble lateral por esa banda. Pero además de todo ello, que no es poco, para que de verdad haya margen salarial, se debe sacar a algún jugador por el que se cobre dinero. Porque todos tenemos claro que, si salen todos los citados, el club se ahorrará la ficha y poco más, con el espacio que se libera de masa salarial tampoco es que sea demasiado.

Y más pensando en que el equipo necesita un central y un medio centro de nivel, y eso, nos pongamos como nos pongamos, cuesta un dinero que ahora mismo, si Lim no lo remedia, no tenemos. ¿Alguna salida fuerte? Nada es descartable, y hay mucho grande de Europa pasándolo mal, pero raro sería que se pagara por alguna de las estrellas del equipo una cantidad que te “obligara” a negociar un traspaso. Aunque todo podría depender de otros factores, estar asociado a terceras operaciones, y colgar de un plan deportivo que, al menos de forma pública, nadie conoce.