¿Afecta a Peter Lim que el "todo" Valencia pida que se vaya a su casa?

“Peter vete ya”, volvió a cantar Mestalla, y con especial fuerza en el minuto 19 del partido contra el Atlético de Madrid, gracias a una iniciativa de Libertad VCF. Todo lo que se haga por el club, y más si s de forma desinteresada, a mí me parece bien, porque cada uno entiende esto de una manera, y por lo tanto y desde ese punto de vista, todo puede llegar a sumar. No voy al hecho en sí, que comparto como todos en esta ciudad (siempre habrá alguno que diga que Lim se quede, pero no tengo claro si es por convicción o por llevar la contraria).

Voy a la repercusión que pueda tener, en definitiva, me pregunto si realmente sirve de algo, si al máximo accionista le pasa factura de algún modo o de si todo este movimiento social puede desembocar realmente en un cambio drástico de la situación. O en su defecto, qué es lo que haría falta para que todo eso se pudiera dar de una vez. Insisto, partiendo de la base clara de que todos, o casi, queremos a Meriton fuera del Valencia. ¿Pero esto le afecta a Lim de alguna manera? ¿Le hace mella en su prestigio o en su amor propio? Lo pregunto sin tener clara la respuesta, porque desde hace más de dos años, los palos de todos los colores y formas le han caído.

Hemos leído a varios medios internacionales hacerse eco de lo que pasa aquí, e incluso él mismo dio una entrevista en la que nos trató con un grosero paternalismo que traspasó cualquier límite de educación. Y la sensación, repito, al menos la sensación, es que ni siquiera hemos rozado el casco de su barco. Tengo claro que la única forma de cambiar el estado de las cosas es que alguien le compre sus acciones, pero eso, a día de hoy, no ha pasado. Y aunque sé que pasará, no tengo nada claro que vaya a suceder en el corto plazo de tiempo, con todo lo que eso conlleva a todos los niveles.