Muchas opciones pero poca especialización en los extremos del Valencia

Si pensamos en los aspectos positivos que tiene la plantilla del Valencia llegamos a la conclusión de que uno de ellos es sin duda la polivalencia. La escasez de fondo de armario y las necesidades puntuales de los últimos años han servido para que muchos jugadores aprendan a aportar cosas al equipo para las que en principio no estaban preparados. Así por ejemplo, hemos visto jugar a Wass de lateral derecho o el paso de Carlos Soler por las bandas, el último ejemplo es el de Hugo Gullamón pasando de la zaga al centro del campo.

La polivalencia es un hecho en este Valencia, y por ello decimos que Bordalás tiene muchas opciones para elegir en las bandas, sin embargo muy pocos jugadores parecen tener el rol de extremos específicos. Quizá el hombre destinado para ser el puñal del equipo era Hélder Costa, pero Bordalás no termina de darle minutos. Cuando Guedes jugó en uno de los extremos no ofreció su mejor versión, y por supuesto Yunus Musah sigue siendo un futbolista por hacer e inclasificable que se pierde en los costados.

Hugo Duro está preparado para actuar en banda cuando se requiera, pero el ex del Getafe tiende a posiciones más adelantadas y no ofrece fiabilidad en el trabajo defensivo. Es una tendencia general que los jugadores de banda del Valencia apuesten más por irse al centro que por la verticalidad, lo que sin duda resta capacidad de sorpresa en algunas fases de los partidos. Si Hélder Costa sigue sin jugar será difícil que el Valencia pueda ser un equipo peligroso por banda exceptuando en las explosivas acciones en las que Correia o Gayá se incorporan desde posiciones retrasadas. Como apunte final hay que citar a otros jugadores que también pueden jugar pero que ofrecen pocas garantías como Álex Blanco y Jason.