Seguimos con el mismo grave problema: Meriton no es el Valencia

El Valencia, la institución, está por encima de todo y de todos. Aquí también hay que explicarse, porque si algo aprendí de tantos años haciendo radio, es que cada uno escucha lo que le da la gana, y da igual lo que tú hayas dicho. Lo dicho no significa que el club se pueda saltar la ley, que quede muy claro, pero hay que diferenciar muy bien a sus gestores de la entidad. Y a sus gestores les pueden llevar al extremo, siempre dentro de la misma ley. Pero al Valencia, al club, no se le puede poner al borde del precipicio.

Al Valencia, al nuestro, no se le puede intentar hacer volar por los aires para llevarse a unos dirigentes coyunturales por delante. No se puede criticar al aficionado que piensa en quién va a ser el entrenador de su equipo o en los fichajes. No se puede demonizar al que esté pensando en sacarse un pase, o media docena, simplemente porque Meriton y Lim son la banda del empastre. Porque el Valencia, para la gran mayoría, está por encima de quien mande, sea quien sea.

Meriton y Lim me dan igual. El Valencia. Si los primeros han cometido irregularidades, a por ellos. Pero nunca a coste del Valencia. Si hay que llevar a los gestores a la justicia porque han cometido, presuntamente delitos, adelante. Pero a la entidad no se le puede quitar el aire para respirar para poder conseguir ese fin. Que se vayan, vale, cuando alguien les compre. Pero mientras, que hagan un equipo y ganemos partidos. Es distinguir, diferenciar, saber qué es una cosa y la otra.