Tener miedo en la Champions League: para qué queremos que le juegue el Valencia

El Valencia y el entorno del Valencia no le puede tener miedo a la Champions League. No entiendo ese complejo de inferioridad que desarrollamos en determinados momentos, porque sólo es puntual, no permanente. Nadie viajó a Sevilla ni se puso delante de la televisión o de la radio pensando que el Barcelona nos ganaba esa final, nadie, y desde luego no nos ganó. Cuando acabó el partido contra el Chelsea, quizá fruto de la frustración por haberlo tenido tan cerca, el pesimismo sobre una victoria en Amsterdam, que dice la lógica que es lo único que nos va a valer porque los ingleses normalmente ganarán al Lille, era más que latente. Y de hecho a mi me han preguntado si hay opciones… de ganar la Europa League. Debo ser muy mayor, porque no lo entiendo.

Cuando celebramos como tocaba el cuarto puesto después de la victoria en Valladolid, no tengo claro si es que alguno pensaba que lo de la Champions era para ir un rato de paseo a Europa y luego ya nos volvíamos a casa a pensar en otra cosa. Recuerdo perfectamente el primer grupo que le tocó al Valencia en esta competición hace ya 20 años: Bayern Munich, PSV y Glasgow Rangers. Nosotros éramos pipiolos y esos 3 equipos habituales de Champions y dos ellos ganadores de la "orejona". No perdimos un partido, porque creímos en nosotros mismos y en nuestras posibilidades. ¿Que el Ajax es mejor que nosotros? Que lo demuestre, que nos gane… si puede, porque a nosotros no nos vale otra cosa y vamos a morir por ello.