Abonado a las segundas partes tras el parón

La victoria ante el Lille dejó una gran satisfacción entre la afición por el modo en el que se consuió el triunfo, fue una remontada arrolladora en los últimos minutos. Sin embargo, el resultado no debe servir para tapar las muchas carencias que todavía tiene el equipo, por un lado la debilidad defensiva y por otro algo que se ha repetido demasiado en las últimas semanas: al Valencia le cuesta demasiado entrar en los partidos. De hecho, no es casualidad que el 90% de los goles conseguidos desde el último parón de selecciones se hayan visto en las segundas partes. Tan solo Rodrigo en El Sadar fue capaz de ver portería en la primera parte. Además, los problemas no solo se resumen con la falta de pólvora al principio de los encuentros, sino que en la mayoría de partidos se vio una cara muy triste del equipo en las primeras mitades.

Pasó en el Wanda, un partido en el que se rascó un punto gracias a una falta en los últimos minutos. En Francia ante el Lille el Valencia jugó un mal partido pero también marcó su único gol en la segunda parte. Más visibles respecto a esta cuestión han sido los dos últimos duelos ante el RCD Espanyol y Lille. Dos primeras partes muy decepcionantes y con errores de concentración que hicieron que el Valencia se fuera con desventaja al descanso. Hay que entrar con mucha más tensión a los partidos y no regalar tantos minutos al rival, no siempre será posible remontar.