Juan Antonio Pizzi y la demagogia ventajista en torno al Valencia

Juan Antonio Pizzi se ha proclamado campeón de la Copa América Centenario al ganar a Argentina a los penaltis, lo que de paso ha supuesto que Leo Messi diga que se retira de la selección después de perder 4 finales con la albiceleste, aunque la noticia en Valencia, donde Pizzi fue jugador (año para olvidar) y entrenador (pasará la historia por perder una eliminatoria de semifinales de Europa League en el 93 por no saber defender el equipo un saque de banda), es que si se hubiera quedado aquí, el club habría ganado varias ligas, alguna Champions y todas las Copa del Rey disputadas, porque de todos es sabido que Pizzi ha estado en los mejores equipos del mundo antes y después de pasar por Mestalla, los grandes de Europa se pelan por él de forma violenta, y el muchacho dirige a Chile porque le tiene mucho apego a los Andes. El cuñadismo valencianí es una una de las cosas más molestas que conozco, esa es la verdad.

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Pizzi es un entrenador normal, como hay miles, y sí, fue cesado porque Peter Lim quería poner a alguien de su confianza, Nuno, que por cierto llevó al equipo a la Champions League el primer año, que a muchos se les sigue olvidando. El que fuera Bota de Oro del fútbol Europeo, pero con el Tenerife, no aqu´i, ha entrenado a equipos menores, antes y desùés, y en Chile ha tenido la virtud de no tocar el trabajo de Sampaoli, manteniendo el bloque y aprovechando la madurez de gente como Claudio Bravo o Arturo Vidal, entre otros muy buenos jugadores que tienen allí. Le dieron para el pelo a México, la eterna mentira del continente americano, y ganaron por penaltis a Argentina, que tendrá que repescar a Maradona y Valdano para volver a ser campeona, y como en Valencia nos encanta pensar que lo que no tenemos es lo mejor, estoy viendo venir que hoy se pide que a Pizzi se le haga una estatua o se ponga su nombre a una calle. Aquí somos así.

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El Valencia de Pizzi cayó en semifinales de la Europa League de forma cruel, seguro, pero llegó a ellas como llegó, después de perder 3-0 la ida de cuartos en Basilea y de remontar en Mestalla en la prórroga con los suizos con 9 jugadores, que ese detalle se olvida. Su paso fue discreto, como toda aquella temporada, y pensar qué hubiera pasado el año siguiente es como jugar al Euromillón, te puede tocar o no, pero es puro azar. Chile ha ganado la Copa América, pues muy bien, Messi deja la selección, fenomenal, el Valencia habría sido mejor con Pizzi... o no. De hecho, si ahora Peter Lim dijera que es el nuevo entrenador, hasta iba a haber cabreos. Un día de estos espero que dejemos de ser así, porque vaya tela...