Emery y sus sanciones deportivas

Unai Emery ya le ha demostrado al mundo que es 'Míster Eficiente' tras un riguroso estudio sobre sus números cosechados en el fútbol. Pero, ¿qué trato/mano tiene Emery con sus jugadores? ¿Respeta la plantilla al técnico guipuzcoano? Por lo visto desde que llegó Emery, la respuesta está más cerca del no que del sí.

Han sido muchos los jugadores que han 'toreado' a Unai Emery desde que este llegase a la entidad blanquinegra en el verano de 2008. Desde Helguera hasta Tino Costa, pasando por David Navarro.

El último jugador en liarla ha sido el Tino Costa con el famoso retweet en el que apoyaba la dimisión de Manuel Llorente y la destitución de Unai Emery. Parece evidente que el dedo le jugó una mala pasada al argentino en el peor momento. ¿Debería el Valencia sancionar del algún modo al centrocampista? ¿Le sancionará Emery? El entrenador ya ha tenido sus más y sus menos con Tino Costa durante esta temporada.

Por lo que hemos podido observar en estos años, Emery no termina de tener termino medio a la hora de decidir sanciones deportivas. El entrenador guipuzcoano empezó fuerte desde su llegada en este aspecto. Timo Hildebrand se presentaba como el portero titular del Valencia tras la retirada de Santi Cañizares. Bien, fue perder el Valencia la Supercopa de España encajando Timo seis goles y cargárselo Unai Emery para siempre. Asi de simple, dos partidos mal y a la calle. Hildebrand nunca volvió a jugar en el Valencia y rescindió su contrato en el mercado invernal de 2008 tras decir públicamente que "no pintaba nada en el equipo". Tremendo.

El siguiente en caer fue Iván Helguera. El central cántabro se las dio de listo en el vestuario y terminó pagándolo tras reírse varias veces del técnico. Hubieron dos acciones claves del central para despedirlo definitivamente: modifico un texto escrito por Emery en la pizarra táctica y bromeó con el problema del brazalete del Valencia tras todos los problemas del año anterior con Cañi, Albelda y Angulo. Lo peor de todo es que Emery dijo en rueda de prensa que 'prescindía de él por motivos puramente deportivos". ¿A quién quería engañar?.

No sabemos si Emery hizo todo esto para ganarse un respeto dentro del vestuario, pero si lo hizo con tal propósito, no lo consiguió. Su supuesta mano duro no caló entre los hombres de la plantilla de ese año ni del siguiente ni el siguiente....

Vamos a recordar las sanciones más destacadas. Unai Emery mandó un año a Ever Banega al Atlético de Madrid tras sus continuas faltas de cuidado personal. El joven argentino vivía solo y se alimentaba fatal, propio de un chaval nuevo en una cultura. Podemos contarlo como aprendizaje/sanción.

Emery no tardó mucho en recibir la primera liada del clan portugués. Manuel Fernandes y Miguel Brito han sido de los jugadores que más veces se han reído del técnico guipuzcoano. El defensa sigue haciéndolo...

Fernandes llegó tarde a entrenamientos, reventó la noche valenciana y su rendimiento fue muy pobre. Emery le fue dando minutos sin mucha fe pero ahí estaba, cobrando y sin hacer nada. Al final se le pudo colocar al Besiktas.

En la temporada 2009/2010 hubo mucha tensión en una plantilla que pareció volverse loca cuando se acercaban los meses finales de competición. En el partido ante el Mallorca fue expulsado Manuel Fernandes tras una semana en la que Emery había incidido en que se tuviese cuidado con las acciones innecesarias. El Valencia llevaba doce expulsiones, una auténtica barbaridad. Fernandes picó en la provocación de Aduriz (entoces jugaba en el Mallorca) y fue expulsado por agredirle. Para terminar de rematar la 'faena', Emery cambió a Banega y este le hizo un feo terrible al negarle el saludo y encararse con él. Tuvieron un pequeño enganchón que deterioró la imagen del club a un nivel altísimo. Emery dijo en rueda de prensa que "Banega le había faltado el respeto al escudo, no al entrenador". Todo por no decir que le había faltado al respeto a él.

[video:http://youtu.be/Vdx8V9TgpUM]

Tras el enganchón con Banega, no pasó absolutamente nada. El argentino siguió siendo titular en el resto de encuentro que le quedaban al equipo che. ¿Alguien lo entiende? Yo tampoco.

Otro de los episodios más recordados del polémico mediocentro sudamericano fue la noche del cumpleaños de Emery. Banega y varios compañeros apretaron más de la cuenta en su salida nocturna y les pasó factura. Ever llegó tarde al entrenamiento y en un estado poco saludable. Se le mandó a casa y no jugó esa jornada ante el Sevilla. ¿En qué cabeza cabe celebrar un cumpleaños un viernes noche habiendo entrenamiento al día siguiente?

A partir de ese momento, Banega perdió la titularidad pero siguió jugando muchos minutos. Solo tuvo dos partidos de sanción deportiva y no se hizo publico. Se quedó fuera ante el Sevilla y el Getafe. Terminó la temporada como titular. Otra vacilada.

El siguiente en la lista es David Navarro y su 'rajada' pública en una radio. Si Emery ya tenía una relación complicada con el central del Puerto de Sagunto, la cosa se puso todavía más fea cuando Navarro criticó la táctica de Emery en una conocida emisora. El guipuzcoano le puso la cruz por siempre. Se marchó al Neuchatel por la puerta de atrás y ahora ha vuelto al Levante.

Por último, cabe recordar el último incidente grave con el 'Chori Domínguez' la temporada pasada. El argentino se negó a entrenar tras un partido en Mestalla y Emery le castigó duramente: Fue apartado del equipo durante una semana sin empleo y sueldo. Curiosamente el argentino ya había tenido un problema con Emery al no querer salir a jugar los minutos finales de un encuentro para 'no recaer en su lesión'. Emery se guardó la multa hasta el mes de abril, cuando multó al argentino con 2000 euros. Una semana después fue la negativa del Chori a entrenar tras un partido ante el Depor y la posterior sanción de apartarlo del equipo. El argentino sigue rajando desde River Plate, lugar donde está cedido hasta junio.

Caso independiente del resto: Miguel Brito. Emery tiene una especial fijación con el portugués haga lo que haga. En este artículo se explica a la perfección los continuos cambios de actitud del guipuzcoano con el portugués tras sus habituales actos de indisciplina.

Con todos estos antecedentes que hemos contado y los que no se han hecho públicos, Emery podría escribir otro libro: Manual del Sancionador Deportivo. ¿Será el más eficiente también en esto?