La reválida para un Valencia que se aleja de la euforia

El clima en el aspecto extradeportivo siempre es noticia en Valencia, el Nou Mestalla ha vuelto a la palestra en una semana en la que poco se puede criticar en lo deportivo y tras días en los que la polémica sobre el mercado invernal estuvo candente. En medio de todo ello el Valencia trabaja a conciencia para dar una alegría a los suyos en la visita a la UD Las Palmas, ganar permitiría afianzarse en la zona media-alta de la tabla y recobraría la moral del equipo lejos de Mestalla después de la mala imagen en el Metropolitano.

Baraja se aleja de la euforia y sigue sin hablar de Europa u objetivos más ambiciosos. Sabe que el exceso de confianza es el gran rival de una plantilla que todavía debe mejorar y aprender en la élite, las victorias son peligrosas en este aspecto y ya se ha demostrado que en La Liga española hay que trabajar y sufrir cada punto.

Un Valencia sin la concentración máxima y sin los cinco sentidos puestos en el fútbol es un equipo endeble. La clave de los buenos resultados está siendo la unión e implicación que tienen los futbolistas, el respeto a la idea del técnico y el convencimiento de que se puede competir contra cualquiera. Para lograr éxitos hay que alejarse de la euforia.