El Valencia se hunde con Paulista perdiendo la cabeza

El equipo defiende bien, no ataca, pero la absoluta pérdida de papales del capitán nos condena, igual que otra roja a Javi Guerra

Toni Hernández | 08 DIC. 2023 | 21:47
Gabriel Paulista

Un Getafe - Valencia lleva años siendo sinónimo de tensión en estado puro, de nervios y duelos que hacen saltar las chispas por todos lados. Sin sorpresa en el once de Baraja, pero con la duda, siempre razonable, de ver cómo respondía el equipo en otro duelo de máxima exigencia. Ninguno de los dos parecía querer el balón de salida, y eso hacía que los primeros minutos fueran mucho más que densos en el juego. Pasado el 10, no había dueño del partido, ni mucho menos, y no existía apenas el juego en las áreas rivales.

El Valencia apenas si tenía control de balón, con Pepelu y Javi Guerra sin incidencia, y eso nos hacía ser planos, muy planos. Pasado el minuto 25, todo seguía igual, y el encuentro se perfilaba como candidato a uno de los más aburridos del año, porque no pasaba absolutamente nada más allá de que la afición valencianista se escuchaba como si estuviéramos en Mestalla. En el 37 se dio lo más parecido a una ocasión de gol en todo el encuentro, en un balón parado lanzado por Pepelu, que Mosquera remataba bastante alto. La acción definía el choque, sin duda. En el 43, de forma totalmente injusta, y absurda, Paulista veía una amarilla por protestar una falta clara sobre Thierry… que suponía la quinta y que le deja fuera el día del Barcelona. Y la primera mitad acababa con un disparo del Getafe, flojo, que suponía el primer disparo local a meta.

La segunda parte empezaba sin cambios, y con el Valencia que parecía querer ir un poco más hacia arriba. Pero al árbitro decidía reventar el partido expulsando a Paulista con otra amarilla muy justa, que ya venía de otra que no era de ninguna manera. Todo cambiaba de forma radical. De todos modos, un capitán con esas tablas, cometía un error que no puede cometer, una vez más. En el 53, Fran Pérez se iba del campo y entraba Diakhaby para tapar el hueco dejado por Paulista. El acaso local comenzó de inmediato, y en el 55 Mamardashvili ya tenía que sacar la primera clara. Y otra más en el 56 después de chutazo de Luis Milla. Y en el 56, volvía a sacar otra con un mano a mano milagroso. Volvíamos a pasar cerca de la portería rival con una falta botada por Pepelu que se iba bastante alto. Con 11 llegábamos poco, y con 10, la cosa no mejoraba. Cuando la teníamos en campo contrario nos duraba muy poco, se nos echaban rápido encima, y no hacíamos ese daño necesario para que el rival midiera el subir al ataque.

Y pasado el minuto 70, el Pipo no movía más el banquillo, quizá con el mismo síndrome de los últimos choques. En el 78, una jugada más o menos elaborada, con saque de banda, la baja Duro, y Pepelu remata fuerte fuera del área aunque muy desviado. Pasado el minuto 80 seguíamos sin cambios, sin tener el balón y sin poder alejar un poco al Getafe de nuestro campo, y eso, de cara al final del choque, era una muy mala noticia. En el 81 se marchaba Diego López, muy apagado,  entraba Jesús Vázquez, que volvía a la Liga después de mucho tiempo. Y como se veía venir, en el 86 se rompió el aguante, con un centro lateral que remataba Borja Mayoral ajustado al palo para hacer el 1-0. Totalmente solo en el centro del área, inapelable. Dos minutos más tarde, en una acción absurda, Javi Guerra era expulsado y tampoco jugará contra el Barcelona. El desastre iba en aumento. Canós y Yaremchuk entraban en el 89 buscando la gesta, pensando en un añadido que se  iba a 5 minutos. Pero ni llegamos. Otra derrota, muchas bajas, y peores sensaciones.