El Valencia de Baraja debe alejarse de la improvisación

Canteranos con mucho protagonismo y poco tiempo para madurar, jugadores que se convierten en parches ante las ausencias y partidos que se escapan por pequeños detalles

Jose Hernández | 04 OCT. 2023 | 08:00
Thierry Rendal

Lamentablemente el Valencia vuelve a ser un club que deja su destino pendiente de la improvisación y la suerte.Es lo que suele suceder cuando la planificación y sobre todo la inversión en futbolistas de calidad brillan por su ausencia. Un año más el equipo empieza a sufrir muy pronto, y cuando hablamos de improvisación es precisamente porque el técnico se está viendo obligado a hacer uso de ella debido a las deficiencias de la plantilla.

Solo de esa manera se explica el gran número de canteranos y jugadores jóvenes que copan la primera plantilla, pero peor todavía es el hecho de que el equipo haya tenido que parchear las posiciones de varios jugadores por obligación, el pasado domingo fue imposible formar un once de garantías y los futbolistas de banda hicieron un esfuerzo por acoplarse a la posición de carrileros; el desastre estaba cantado. Por no hablar de un ataque que solo cuenta con dos delanteros específicos, un recién llegado al fútbol español y un jugador que no ha comenzado mal el curso pero que llega de firmar una campaña decepcionante.

El Valencia se juega su futuro a dos cartas: por un lado la capacidad de Baraja para manejar un grupo tan inexperto y ser capaz de imprimirles espíritu de superación, por otro lado la inspiración de un futbolista que ha roto todas las puertas pero que no llega a la veintena de encuentros en primera división, Javi Guerra. La improvisación y jugar al borde del precipicio vuelven a ser constantes en el Valencia CF.