Gabriel Paulista y demostrar que eres líder en el Valencia

De lo que hizo Gabriel Paulista en el Bernabéu no me preocupa la patada, que es algo que se puede dar aunque no lo defiendo, sino la inconsciencia de no saber en qué situación estamos, siendo él uno de los que debe dar ejemplo dentro del campo y fuera. No es la primera vez que el español de origen brasileño hace una de estas, de hecho sus ida de olla han sido uno de los lastres que ha tenido, pero el momento es el más delicado desde que vino al Valencia en 2017, y si tipos como él no entienden la situación, el problema es mucho mas grave de lo que todos podemos pensar.

En cualquier partido del equipo creo y siento que vamos a ganar, aunque estaba claro que lo del Madrid no era el escenario ideal por todo. Pero quería que diéramos la cara, ese paso al frente del que hablaba Guillamón al terminar el encuentro. La primera parte me dejó mejores sensaciones de lo que podía pensar, y luego vino la desconexión y los goles. Pero cuando Paulista pierde los papales, y más pensando en Girona, es cuando de verdad me preocupé, y mucho, porque mis esperanzas, como entiendo que las de muchos, están puestas en los que pueden y deben aguantar mejor la presión y tirar de la gente más joven e inexperta.

La reacción de Voro al final del choque es la de un gran gestor de grupo, que al final es lo que va a ser en este equipo, pero el mal cuerpo ya se nos quedó. Lo vamos a perder algunos partidos, esperemos que lo menos posible, porque no podemos prescindir de nadie, pero esto no se puede producir, ni en él ni en nadie jamás. Nos estamos jugando demasiado como para caer en estas trampas emocionales que no niños dan nada.