La hora de Gennaro Gattuso en el Valencia: toca ser un gran entrenador

Creo ciegamente en Gattuso como entrenador del Valencia. Lo he dicho desde el primer día y lo sigo pensando ahora. Ha entendido dónde está, ha calado al entorno, sabe de primera mano lo que quiere y piensa la propiedad, se ha metido al vestuario en el bolsillo. Pero ahora toca el do de pecho en el campo, donde se gana y se pierde, donde está la verdad de este asqueroso y maravilloso deporte llamado fútbol.

Tiene una plantilla muy joven a la que falta veteranía, y que cuenta con una serie de carencias que todos tenemos muy claras, él y Corona también, y que se supone que se van a intentar solucionar en este mercado de invierno. Pero el buen entrenador es el que hace mejores a los jugadores que tiene, al equipo con el que cuenta. No necesariamente el que ficha estrellas y gana con ellas. Bordalás hizo al Valencia mejor de lo que dictaba su nivel, aunque se centró en la Copa y dejamos un poco la Liga, tal y como él mismo reconoció.

Pero dio ese paso, con su fútbol y con su estilo, pero lo dio. Ahora le toca a Gattuso. Ya sabemos que con todos los buenos somos un equipo interesante, pero eso no pasa siempre, y los partidos dan muchas vueltas. Y ante eso es cuando se deben crecer los buenos, cuando emergen los grandes. Se está acusando a Rino de que sus cambios no ganan partidos, que no lo sabe leer cuando se van jugando (algo que dijimos muchas veces de Unai, por cierto), y es el momento en que esa dinámica cambie a favor de una vez. El duelo del jueves no es contra el Betis, sino contra nosotros mismos. Y ganar es mucho más importante de lo que nadie pueda pensar, mucho más que por el mero hecho de sumar los 3 puntos, que son como el aire para respirar.