Tener razón con el Valencia no nos va a ayudar, a nada ni a nadie

Sacar pecho en los malos del Valencia momentos es muy feo, pero aquí hace mucho tiempo que prima el tener razón sobre todo lo demás, y así, lógicamente, todo es mucho más complicado. Podemos darle mil vueltas, pero con 9 fichajes y con la inversión hecha este año, seguimos teniendo por encima al menos 7 plantillas de Primera División, y eso es algo que se debe poner encima de la mesa antes de decir que "la Copa tapa muchas mentiras", porque la Copa no tapa nada.

Darle cera a la plantilla o a Bordalás, por parte de quien sea, tampoco es de recibo, porque aunque todo es muy mejorable, porque podemos hacer más cosas y cometer menos errores, es obvio que nos faltan piezas. Ya no para ser un equipo altamente competitivo, sino para ser lo que pretende el técnico alicantino, que si confiamos en él a muerte (y a esto deberían contestar muchos), es lo que procede en los próximos mercados.

Ahora miso, todos esos discursos grandilocuentes, todo ese regodearse en lo malo como si por eso las cosas fueran a estar mejor, esa superioridad moral a la hora de calificar a los que piensan de un modo u otro, como quedar, queda bien, pero no sirve ni para papel del water, y deja muy retratado al que lo hace. Y ojalá, por el bien del Valencia, el día 2 por la noche seamos finalistas. Las carencias serán las mismas, pero las vergüenzas de algunos serán más evidentes.