El Valencia no puede vencer todas las adversidades y la mala suerte

Demasiadas adversidades y bajas, y mala suerte en momentos puntuales para un equipo que, sin estar bien, no mereció perder

Toni Hernández | 31 DIC. 2021 | 17:12
Hugo Guillamón

El Valencia - Espanyol era la gran oportunidad de los de Bordalás para acabar 2021 en Champions League. Para ello había que reponerse a muchas bajas por lesiones, sanciones y el COVID-19, y ganar a los pericos. La primer ocasión, en el primer minuto, fue de Wass, que remataba fuera una buena jugada a balón parado. En el minuto 7, enorme jugada de Costa, que ganaba linea de fondo, y Hugo Duro remataba de cabeza al palo. Thierry Rendall y Costa generaban mucho peligro.

El partido era entretenido, muy abierto, sin dueño claro pero con los locales buscando mucho más el marco contrario, aunque con poca fortuna. Llegados a la media hora de juego, el ritmo había bajado, y la sensación era que el Valencia no había podido completar su plan de partido marcando primero. Se abría un nuevo escenario. Pero desde ahí y hasta el final, ni unos ni otros inquietaban el marco rival, aunque los visitantes acababan quizá un punto mejor.

La segunda parte empezaba sin cambios, pero con la necesidad de que el Valencia volviera a mandar en el partido. Aunque la primera, a los 15 segundos, fue de RDT, que con todo a favor, remataba fuera. Error descomunal de toda la defensa y de Cillessen. Los de Bordalás devolvían el golpe y a punto estaban de marcar en una jugada con varios rechaces en el 47. Y tras dos saques de esquina, una buena segunda jugada de Hélder Costa, que ponía un centro magistral, y Alderete remataba de forma inapelable para el 1-0 en el 50. El comienzo había sido loco pero dejaba el choque más de cara, aunque faltaba un mundo. En el 60, el Espanyol tenía una buena ocasión, pero esta vez sí, el meta holandés hacía una buena parada. El equipo necesitaba un cambio a falta de 25 minutos de forma clara, porque empezaban a faltar piernas para poder darle el golpe final al duelo. Se iba Jesús Vázquez, tocado, y entraba Piccini para ocupar el carril derecho, pasando Thierry al izquierdo.

El Valencia se encerraba buscando defender bien y lanzar alguna contra, y el Espanyol cada vez jugaba más en campo contrario… y con más peligro. Además, aparecían los problemas físicos, con Alderete o Thierry, que estaban con calambres faltando muchos minutos. En el 76, el luso se iba del campo dando paso a Rubén Iranzo. En el 81, Hugo Duro cometía un claro penalti y era expulsado con la segunda amarilla. Un desastre absoluto de jugada. Cillessen podía pararlo, pero el lanzamiento de RDT se convertía en el 1-1. Cheryshev y Koba entraban por Wass y Costa. Y en el 88, en una jugada de manual, Puado hacía el 1-2. Tocaba más heroica que nunca. Iranzo remataba al larguero un saque de esquina de Soler cuando se cantaba el empate. No hubo tiempo para más, y se fueron los puntos de Mestalla.