El Valencia le pega un portazo a la Liga y gana al Levante

El Levante - Valencia tenía como aliciente la vuelta de Bordalás al banquillo, después de superar el COVID-19, y también ver cómo afrontaba el técnico alicantino las muchas bajas por lesión y sanción que acumulaba. Los primeros minutos fueron de tanteo, pero al menos en sensaciones, parecía tenerlo más claro el cuadro visitante. La primera ocasión de peligro la tenía Soler con un disparo lejano cerca del cuarto de hora. Respondió el Levante en el 18, con un remate al saque de un córner que se iba al larguero… pero el balón había dado en el brazo de Diakhaby y el árbitro, a instancias del VAR, pitaba penalti. Cillessen lo parabas, pero en el rechace, Campaña hacía el 1-0 con una defensa dormida.

Pero sólo era el preámbulo del error terrible en el segundo gol, ya que tras una falta a favor, el Levante lanzaba una contra que terminaba en 3 para 1 y gol de Roger. Todo cuesta arriba, mucho, en 23 minutos. Tocaba remar como en tantos partidos, pero con la sensación de que con muy poco te habían hecho mucho daño. En otra contra, Morales no hacía el tercero porque Diakhaby se interponía en su remate. En el 43, primera jugada clara y buena del equipo, con presión y combinación, y Guedes, que había pasado de puntillas por el encuentro, lanzaba un zurdazo inapelable para hacer el 2-1 en el 43. El tanto puso las pilas al equipo, que tuvo un arreó en el que estuvo a punto de empatar. 2-1 al descanso, pero con la sensación de que todo estaba muy abierto.

La segunda mitad empezaba sin cambios, y con el Valencia vivo cuando nada daba un euro por él. Aunque en el 47, el Levante tenía una doble ocasión escandalosa, con un remate al larguero y el rechace que lo salvaba Cillessen. Y en la contra, Hugo Duro pisaba el área rival y Vezo le hacía un penalti claro. Y Carlos Soler, con su pausa habitual, hacía el 2-2 en el 49. Empezaba de nuevo, y con 41 minutos por jugar. Aunque el Levante seguía teniendo ocasiones claras y sus cambios eran ofensivos. Bordalás, llegando al 60, estaba a la espera. Justo en ese momento, Cheryshev se iba al banquillo y entraba Marcos André, desplazando a Hugo Duro a la izquierda. El encuentro era de ida y vuelta y estaba totalmente abierto, podía pasar de todo. André, en una buena jugada individual, podía hacer el 2-3, pero su remate se iba fuera por poco.

Y Guedes, en la siguiente jugada, tenía otra clara después de una buena presión. En el 70, otra clara de Guedes después de una buena dejada de Costa, pero Cárdenas hacia una buena parada. En el 71, Piccini se iba y daba paso al debutante Rubén Iranzo. Y un minuto después, jugada perfecta del Valencia, con pase interior de Guedes de lujo, y un remate bestial de Carlos Soler para hacer el 2-3. Locura de la afición visitante después del tanto. Había que defender bien, y atacar mejor buscando los espacios que sin duda se debían generar. Y en una contra descomunal, genial, Marcos André rompía la defensa granota, y servía un balón a Guedes que, con una calidad de muchos quilates, hacía el 2-4 en el 85. En el 88 Racic dejaba su puesto a Musah. En el 91, el Levante hacía el 3-4 y ponía emoción al final del choque. Pero no hubo tiempo para más, el Valencia ganó, y ya empieza a mirar para arriba.