La renovación de Carlos Soler por el Valencia

La renovación de Carlos Soler por el Valencia es otro asunto capital que el club debe dejar zanjado de forma y manera inmediata. Podemos decir que es un pack junto con la de José Luis Gayà, y que además de su importancia deportiva, porque son dos puntales básicos en este equipos, estamos hablando de dos futbolistas que además son icónicos para la coyuntura actual. Valencianos, valencianistas, canteranos, con los pies en el suelo, que han sabido tirar de la plantilla y remar en los momentos malos…

Un tesoro que no se obtiene siempre, que a veces pasan décadas sin que surja, y que ahora mismo lo podemos disfrutar en cada partido. Los dos se quieren quedar, pero es evidente que además de sus sentimientos está su profesión, que viven de esto, y están en la mejor edad para firmar un contrato de escándalo, quizá el mejor de su carrera. Y que no le queda duda a nadie de que ambos se quieren quedar aquí por encima de todo, ya que si fuera al contrario, este verano habrían apretado de lo lindo para salir. Lo dijo Soler hace unos días, en unas declaraciones que son muy sencillas y a las que se han dado demasiadas vueltas intentando buscar los 3 pies al gato.

"Tengo contrato hasta 2023. Si se llega al último año de contrato se puede llegar a una situación como la que se dio con Ferran Torres. Llevo 17 años en el Valencia y es donde siempre he querido jugar. Me gustaría seguir, pero nunca se sabe". El mensaje es muy claro, más allá de lo que se quiera ver. Si el club le pone una oferta a su altura, y el compromiso es armar un equipo para volver a luchar con todos, se quedará. Lo mismo que Gayà. Repito por enésima vez, y tengo claro que no será la última: Peter Lim, no la podemos cagar con esto, que son dos símbolos de esta entidad.