Cómo hacer mejor a Uros Racic en el centro del campo del Valencia

Uros Racic puede y debe ser mejor jugador de fútbol, porque tiene condiciones para ello, y un contexto en el Valencia, perfecto. Lo primero es definir qué es. No es un "6", es decir, un medio centro defensivo al uso. No podemos confundir su capacidad de trabajo y su sentido de la anticipación a lo que piensa el contrario con la agresividad que tienen esos perfiles. Porque además, tiene mucha calidad con el cuero en los pies y visión de juego, el juego en largo. Y algo que debe hacer que su posición cambie y que es lo más complicado en el fútbol: gol.

Racic debe estar más cerca de la portería contraria, que no significa eso que deba actuar de media punta. Pero su disparo desde fuera del área es un arma extraordinaria, que en el fútbol moderno se usa más bien poco, pero que en muchos partidos de esos que se atascan sin remedio puede ser tan efectiva como el balón parado. Por cierto, y respecto a esto, no confundamos ser alto con ir bien por arriba según para qué cosa, porque el serbio no es un portento en ese tipo de fútbol. Las cosas son así.

Por sus características, a Racic le pasa como a Soler, que con un sistema de 3 por dentro y un medio centro defensivo, podría rendir mucho más y mejor. Ahora se tiene a Oliva, que como valencianista aún no sabemos si es bueno o malo, pero que es el "6" más puro que hay en la plantilla, aunque Gracia apenas si lo ha utilizado. Con el serbio pasa como con muchos jugadores, que no es sólo su evolución personal, sino también cómo lo hace el contexto. Es un pepino de futbolista, pero puede y debe serlo mucho más aún.