El Valencia puede dormir tranquilo mientras Gayà se recupera

Toni Lato sabe cuál es su rol dentro de la plantilla del Valencia, pero cuando le dan oportunidades, las agarra con toda la fuerza

Toni Hernández | 29 NOV. 2020 | 07:30
Toni Lato

Toni Lato es un gran jugador de fútbol, y un enorme activo del Valencia. Lo puedo decir mil veces, y por aquello de que es una debilidad personal, perder algo de fuerza. Pero luego llega Toni, juega como titular, y entonces simplemente te das cuenta que no te puede el cariño. Lleva mucho tiempo en el primer equipo aunque no lo parezca. Debutó en la campaña 16/17, en edad todavía juvenil, pero nunca se ha podido consolidar a pesar de ser un asiduo en la selección española sub21 y ser nominado como uno de los 100 mejores futbolistas de su edad en todo el mundo.

Y es que vivir en la época de José Luis Gayà en el Valencia siendo lateral zurdo, es una profesión muy dura, que el de la Pobla de Vallbona ha sabido llevar con profesionalidad, esperando siempre su momento. El año pasado, a pesar de lo que muchos pudieran pensar, le vino mucho mejor que peor. ¿Que si hubiera jugado mucho más lo agradecería? Pues claro que sí, pero hay veces que la maduración se puede dar fuera del césped, y ver luego su repercusión dentro.

Sufrió mucho, estuvo lejos de casa (aunque los suyos siempre estuvieron con él), aprendió que el fútbol es muy injusto y muy perro muchas veces, y eso luego se traduce en madurez cuando juegas. Y cuando no lo haces también. Gayà está por delante, de él y de casi todos en el planeta fútbol, pero que no lo tengamos de forma puntual, ya podemos decir que no es ningún drama.