La refundación del Valencia: eso ya no sería el Valencia

Somos de un equipo concreto, con lo bueno y con malo, con el pasado glorioso y el presente incierto, pero no de otro que pueda venir

Toni Hernández | 02 NOV. 2020 | 07:00
Bandera fundacional del Valencia

La refundación del Valencia como algo que de verdad está encima de la mesa. O de la mesa de algunos, que esto habría que estudiarlo con mucho detenimiento. Hablaré con calma de Juan Martín Queralt, que es a quien le he oído este concepto, pero no será en este artículo. La refundación del club se podría dar por muchos y diferentes motivos, pero lo que no podríamos consentir, y esto es sólo mi opinión, es terminar con más de 100 años de historia, y con todas nuestras historias y las de nuestras familias, simplemente por el hecho de no querer un determinado tipo de club.

Eso es egoísmo, porque en otras épocas a mí no me ha gustado lo que había, ni quién había, y en mi cabeza podían anidar muchas ideas, pero nunca la de cargarme el Valencia y montar otro. Que ya no sería el Valencia, sino otra cosa que no tendría nada que ver. Comprarle el club a Peter Lim, pagando la propia entidad esa compra con fondos propios, no voy a decir que sea un disparate, pero no tiene pinta de ser la mejor opción por muchas cosas. Y si es o eso o nada...

Estamos dando por hecho que el máximo accionista va a apretar el botón de auto destrucción en cualquier momento, y eso, tanto por convencimiento como porque no me cabe en la cabeza, es un escenario que no contemplo. Si la supervivencia del Valencia pasa por tener otro dueño, que al final es lo que nos hemos buscado, que así sea. Porque la idea romántica de empezar desde abajo y subir es maravillosa, pero un día, para entrar en el fútbol profesional, tendrás que convertirte de nuevo en sociedad anónima deportiva, y tus problemas serán los mismos. Cuando digamos determinadas cosas, vamos a pensarlas primero un poco.