Si todo lo que haga el Valencia, aunque sea lo que pidamos, está mal, tenemos otro problema

Cuando todo lo que hace el Valencia, y todo es todo, está siempre mal, aunque haga cosas que se le piden sistemáticamente, el problema es mucho más profundo que un máximo accionista que da la sensación de que le damos igual (me resisto a pensar que eso sea así, dicho sea de paso). He sido el primero en pedir al club que hable, que haya alguien que sea su cara, que nos cuente las cosas, que nos las explique. Que se defienda, por el amor de Dios, que en la vida no se puede hacer todo bien, ni todo mal tampoco.

El doctor Zaragosí hacía las veces la semana pasada. Una entrevista hecha por el propio club, sin contra preguntas, que desde luego faltaban, pero que era, aunque fuera sólo un poco, lo que se debe hacer en una entidad seria. Los insultos y faltas de respeto, las mofas sin límite e incluso algunas salidas de tiesto que me sentaron muy mal porque venían de gente a la que le tengo aprecio, me hicieron pensar, una vez más, que cuando todo está mal, cuando nada vale, cuando es lo mismo hablar que callar, cuando nada de lo que se diga sirve, cuando el entorno destroza a un interlocutor incluso siendo de aquí, el problema es mucho mayor.

No voy a decir nada de nadie, porque aquí cada uno piensa como le da la gana y somos todos mayorcitos. Pero como eso me incluye a mí, diré que sentí vergüenza ajena de algunas reacciones. Y yo también quiero que hable Lim, y que la entrevista sea abierta. Pero de una cosa a otra, hay un trecho largo.