La operación limpieza en el Valencia, a expensas de rendimientos

Muchos jugadores se están jugando su futuro en el equipo de cara al año que viene, y si valen o no se debe reflejar en el campo

Toni Hernández | 26 JUN. 2020 | 09:00
El Valencia entrenando

En el Valencia puede haber una operación limpieza grande este verano. Es más, ya no a nivel deportivo, sino a otros, más que llamarlo limpieza lo podríamos llamar regeneración, aunque en cualquier caso, sería algo absolutamente necesario. No vamos a entrar tampoco en el terreno de si unos jugadores u otros están más o menos amortizados, pero está claro que algunos vinieron para un perfil de fútbol muy concreto, que otro distinto no les viene bien, y que si la confianza en Celades sigue de cara al año que viene (que eso es algo que se empieza a poner en duda en muchos mentideros valencianistas), lo van a tener muy complicado para seguir.

Y no entramos ya en la cuestiones de índole económica, porque es obvio que eso también va a marcar el tipo de decisiones que se terminen tomando respecto a algunos futbolistas. De ahí a ”matarlos” va un trecho, pero es lo que hay. Los primeros partidos post confinamiento han generado más dudas y cabreos que los últimos jugados por el equipo antes de meternos todos en casa por la crisis del COVID-19. El día del Levante fue todo extraño, y acabó siendo un desastre, y el día del Madrid se pasó de ser un gran equipo a ser una sombra, robo arbitral de turno a medio camino.

La imaginen que se dejó fue mala, muy mala, y algunos jugadores dejaron una foto fe de ellos mismos, que quizá no se corresponda con la absoluta realidad, pero que ahora mismo es la sensación que transmiten. La lista negra de este verano parecía clara en base a las necesidades del equipo, pero algunos deben saber que la actitud también es un factor que cuenta en este club. Y mucho.