El Nuevo Mestalla puede ser una realidad el 31 de marzo, que no nos venga tan mal

El Nuevo Mestalla le viene mal a mucha gente en Valencia. Le viene mal que se acabe, claro, porque si ADU Mediterráneo llega a decir que se pospone la firma de la venta del actual Mestalla quedaba sin fecha, que ya veríamos qué se hacía, habría ardido Troya, pero no dijo eso, sino esto: "el 31 de marzo, el Valencia podrá tener el confort y tener su salida a la financiación al nuevo estadio resuelto". Es curioso. Porque se hizo hasta complicado encontrar la frase sin estar muy escondida en muchos sitios. Es para volverse loco que algo tan sumamente importante dé igual, o peor, venga mal que se haga. Lo llevo diciendo muchos meses, y cuanto más tiempo pasa, más claro tengo que es mucho más que una sensación mía.

Me sigue pareciendo una obscenidad que cualquier cosa que sea positiva respecto al futuro estadio pase de puntillas, desapercibida, poco menos que si molestara. Está muy claro que hay que comprobarlo todo, que debe llegar la fecha y ratificar con hechos las buenas palabras y las mejores intenciones, pero no es menos cierto que si los mensaje de ADU Mediterráneo fueran negativos aquí habría un linchamiento público. No termino de entender la razón por la que cualquier cosa respecto al Nuevo Mestalla no importa, especialmente las buenas. Como si nos gustara, como si fuera un problema en lugar de una bendición. No lo entiendo y me repatea, porque alguno tendría que empezar a asimilar que sin esto no crecemos. Aunque igual vive mejor siendo un mediocre.