Y Kondogbia nos calló la boca a todos...

Sigue pudiendo mejorar, pero tuvo que ayudar y mucho a Parejo, a nivel físico estuvo sobresaliente, y la guinda la puso marcando un golazo

Toni Hernández | 06 NOV. 2019 | 07:48
Geoffrey Kondogbia

Y Kondogbia nos calló la boca a todos. No sólo por el golazo que le metió al Lille y que cerraba un partido que pintaba muy distinto media hora antes, sino porque por fin le vimos lo más parecido a un encuentro completo. Tuvo que ayudar, y mucho, a Dani Parejo, que lo sigue pasando mal con el 4-3-3 y con el 4-4-2, pero a nivel físico era el “Kondo” que todos tenemos en la retina, llegando a todas, cortando infinidad de balones, con problemas en la creación pero que esa no debe ser su función, y con 5 pulmones que le permiten correr y correr como si no hubiera mañana. Eso al equipo le da un aire extraordinario, porque le permite estar mejor cuando peor está el rival, y no en vano se han remontado dos partidos en la segunda partes en los últimos días. Otro tema es si un día de estos nos ponemos por delante en el marcador para variar…

Con Coquelin lesionado, la figura de Kondogbia debía emerger con más fuerza que nunca, porque era muy necesario, vital incluso. Celades y sus compañeros son conscientes de ello, y desde luego el propio jugador, al que se le puede juzgar el acierto, pero no puede haber dudas en cuanto al compromiso. Ahora hay que ganar al Granada, tendremos que ver cómo ser marcha con su selección, algo que no ha ido bien pero no hay más remedio, y a la vuelta, terminar un mes de noviembre que va a ser de emociones fuertes. Y con el mejor Kondogbia posible al máximo rendimiento.