La veteranía marcó diferencias en la temporada del centenario

El Valencia campeón de copa es una mezcla de jóvenes hambrientos con jugadores veteranos con muchas batallas a sus espaldas. El gran líder de este equipo es Dani Parejo, un futbolista que tras ocho años en la entidad pudo por fin levantar un título, el de Coslada representa a la perfección la evolución y madurez que ha alcanzado el Valencia. El conjunto de Marcelino ha disputado tres semifinales en dos años, alcanzando el título de copa en uno de esos torneos. Los veteranos han ayudado a los jóvenes y existen numerosos ejemplos en la plantilla de futbolistas que han sido determinantes. Así por ejemplo encontramos a Garay o Kevin Gameiro, ambos superan la treintena y acumulan numerosos títulos a sus espaldas, en la final de Sevilla no se amilanaron.

Paulista y Rodrigo con 28 años, y Daniel Wass con 29 también son jugadores que han aportado cosas desde la experiencia. Incluso Gayà, quien cumplió 24 años el pasado sábado ya es un futbolista curtido en mil batallas y que sabe lo que es pasar momentos de dificultad. Ahora hay que transportar esta experiencia y evolución a la Champions League, donde el equipo fue novato el pasado año y pagó su falta de galoes ante poderosos como el United y la Juventus. Este Valencia está preparado para todo y puede competir con cualquiera, la victoria ante el Barça ha sido un aviso y el signo de que esta mezcla de veteranos y jóvenes talentosos puede marcar un ciclo, el Valencia de Marcelino es un bloque equilibrado.